A escasos metros de la alfombra azul coincidieron dos manifestaciones muy distintas: una antimonárquica, organizada por Marchas de Diginidad y otra convocada a través de la redes sociales, que reivindicaba la unidad de España. Las dos concentraciones se desarrollaron de forma pacífica frente al teatro Campoamor, que alberga la entrega de los galardones.

Como ya viene siendo habitual en los últimos años el movimiento social Marchas de la Dignidad ha organizado una concentración republicana en la plaza de La Escadalera de Oviedo. Es ya un clásico ver en esta manifestación banderas republicanas o banderas de Asturias con la estrella roja.

Entre el gentío que se hacía escuchar en la plaza de la Escandalera se encontraba el colectivo "Luchando por la soberanía". A gritos de "Independencia, puxa Asturias" o "Asturias no se vende, Asturias se defiende" dejaron clara su postura para el futuro de la región y hasta realizaron un simulacro de referéndum a favor de la república asturiana. A las consignas a favor de la independencia de Asturias se sumaron otras contra la monarquía y también contra el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. Las más seguidas: "llibertá de los presos políticos" o "L'Asturies obrera ta na Escandalera".

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Vítores y abucheos frente al Teatro Campoamor

En la céntrica plaza ovetense, junto a los manifestantes, estaban representantes políticos como los diputados autonómicos de Podemos como Lucía Montejo y Héctor Piernavieja, trabajadores de Duro Felguera y Liberbank o el colectivo de Trabayadores en Llucha. Estos últimos denunciaron la situación de las empresas en la región y la falta de futuro para los empleados asturianos. "Viva la lucha de la clase obrera" fue su grito de guerra.

Al otro lado de la calle Uría, los manifestaban a favor de la unidad de España gritaban consignas a favor de la monarquía a mientras sonaba música militar. Los concentradas portaban banderas de España acompañados de dos banderas de Asturias y una de la Unión Europea. "Estamos en un momento crucial para la historia de España y los que defendemos la Constitución venimos a apoyar al Rey", sostiene Claudia Álvarez, que esperaba en primera fila la llegada de los Reyes con una bandera de España apoyada en la valla.

Las dos concentraciones estaban separadas por el dispositivo policial y una calle Uría cortada y vallada, por lo que no se produjeron incidentes. Sin embargo, mientras unos abucheaban a los Reyes o al presidente del Gobierno Mariano Rajoy, que ha acudido por primera vez a los galardones, otros vitoreaban a los monarcas y a los políticos a su llegada al Campoamor.

Unas consignas a favor y en contra que tapaban los sonidos de las bandas de gaitas que recibían a los invitados y autoridades. Y mientras tantos, centenares de curiosos, algunos con banderas de España y carteles de 'Viva España. Viva Cataluña' se agolpaban en las vallas para ver la entrada de los asistentes a la ceremonia.