"Es posible que venga alguna cosa, pero yo tampoco he pedido demasiado". Si ya lo tiene difícil Abelardo, Tomás Hervás asume su rol con naturalidad. Es el entrenador del filial en un equipo de cantera y lo que toca es más mirar hacia abajo, por donde asoma Joel Sanabria entre otros, que hacia afuera. En todo caso, la dirección deportiva trabaja en la incorporación de un hombre de ataque. Otra puerta que se abre es la de salida. El club busca acomodo a futbolistas que no entran en los planes de Tomás como son los casos de Algisi o de Mota y también del portero Pol Busquets. Tampoco es una cuestión urgente y los futbolistas podría seguir en el club si no surge ninguna alternativa de su agrado.
La mente de Tomás está centrada en el Compostela, próximo visitante del Pepe Ortiz. Es un equipo del que el técnico esperaba claramente mucho más. "Me sorprende muchísimo su mala clasificación porque, en mi opinión, tiene muy buenos jugadores, de los mejores de la categoría en sus puestos", sostiene Tomás.
El técnico berciano está pendiente de la enfermería. Tomás tiene la baja confirmada del sancionado Julio y de los lesionados Algisi, Chus, Mota y Ramón. Está en duda el concurso del delantero Mendi y de Víctor Ruiz, quienes comenzaron a entrenarse el jueves de esta semana.
"La visita del Compos es de esos partidos que puede marcar un punto de inflexión. En caso de ganar los dejamos a diez puntos", advierte. Tomás entiende que harán falta 46 puntos para olvidarse de los apuros clasificatorios. Pese a la derrota ante el Lealtad, el filial se encuentra en una buena trayectoria.
