La imagen de Duje Cop tomándose el pulso con dos dedos en su cuello, justo antes de iniciar la carrera para lanzar el penalti que se iría por encima del larguero del marco defendido por Keylor Navas, fue uno de los momentos del partido entre el Madrid y el Sporting. "Estaba tranquilo y confiado de marcar. No sé qué pasó", sentencia el croata, tras explicar que se sirvió de medir sus pulsaciones para evaluar si estaba nervioso. Un método utilizado por un compatriotra suyo, Davor Suker, exjugador, entre otros equipos, del Madrid. "Vi que Navas se tiraba al lado contrario y pensé en ese momento que sería fácil marcar, pero en un segundo vi que el balón se iba por encima del larguero", lamenta el atacante rojiblanco, consciente de que ahí también se escapaba la oportunidad de atar un valioso punto para los gijoneses.

"Hemos jugado mucho mejor que en los últimos dos partidos. Así es como necesitamos jugar", subraya Cop para reivindicar el lavado de imagen del equipo después del naufragio visto ante la Real Sociedad. Lo dice con la boca pequeña. Al delantero del Sporting no le cuesta reconocer que, de haber estado más acertado en esa acción ante Keylor Navas, la suerte del equipo hubiera cambiado. "No hemos sumado otra vez y esto es negativo, porque tuvimos la oportunidad de lograr un punto si llego a marcar el penalti", explica. Mejor suerte corrió en los partidos ante el Leganés y el Celta, donde no dudó desde el punto de penalti, algo que remarcó Abelardo al finalizar el choque en el Bernabeu.

Cop es crítico y asume que "no se puede celebrar nada cuando pierdes, aunque sepamos que éste es el camino para los próximos partidos". Más allá del de Copa de este martes, ante el Éibar, en El Molinón, el vestuario apunta a la próxima jornada liguera, también en casa, ante Osasuna. "Ese partido es una final. Espero que lo consigamos", dice el atacante rojiblanco sobre la oportunidad de romper con una racha de diez jornadas sin lograr la victoria. Cop coincidió ayer sobre el campo con algunos de sus compañeros de la selección. Los croatas Modric y Kovacic terminaron ganándole la partida.