La victoria lleva meses dando la espalda a Sporting y Leganés, dos equipos que se jugarán el domingo buena parte de sus opciones de permanencia en Butarque. La urgencia es mucho mayor para los rojiblancos, a los que sólo les vale el triunfo para recuperar la esperanza en la permanencia y evitar que los pepineros, con cinco puntos de ventaja, marcando los puestos de salvación, acaben de escaparse. El conjunto gijonés deberá romper con una racha de siete partidos sin ganar, mejorando las cifras que le colocan como peor visitante de la categoría junto a Osasuna, y en un campo donde los madrileños sólo han ganado una vez en toda esta campaña, precisamente ante los navarros, el 21 de noviembre. Desde entonces, el Leganés no ha ganado ni en casa ni fuera, encadenando nueve jornadas sin lograr los tres puntos. En las dos últimas, tampoco a conseguido ver puerta.

El vestuario del Sporting se aferra a ganar en Butarque como el primer paso de una reacción que los buenos propósitos no han evitado que se vea pospuesta semana a semana, hasta el punto de alcanzar la jornada 21 con sólo 13 puntos en su haber. Hay que remontarse a la temporada 2011-12 para encontrar el último ejemplo de un equipo que, con ese balance, o peor, consiguió finalmente librarse de perder la categoría. Lo logró entonces el Zaragoza, que llevaba a estas alturas un punto menos que el Sporting, 12. Los maños alcanzaron los 43 puntos al final de campeonato, en una segunda vuelta con una media de resultados propia de clasificarse para Europa. Un camino, en mayor o menor medida, al que está abocado el Sporting si quiere continuar en la máxima categoría del fútbol español.

Con tiempo por delante y ejemplos a los que aferrarse, el Sporting debe echar el resto en Butarque para ampliar la sequía de los pepineros y dar motivos para la confianza. El hecho de que el conjunto dirigido por Asier Garitano sólo hay sido capaz de superar a Osasuna no oculta que se haya caracterizado por ser un equipo rocoso al que le acreditan los otros cuatro puntos sumados ante su público. Los empates en Butarque ante Atlético de Madrid, Eibar, Villarreal y Athletic de Bilbao dan muestra de por qué el Leganés cuenta con cinco puntos de colchón sobre los gijoneses.

El hecho de que el Sporting tenga que ir a por el triunfo desde el primer minuto puede llevar a que Rubi piense en introducir un esquema táctico más atrevido que el aplicado desde su llegada al banquillo. La incorporación de Traoré durante el mercado de invierno aumenta las opciones para salir de inicio con dos delanteros, una posibilidad que valora el técnico catalán y que ya puso en práctica durante los últimos compases del choque ante el Alavés. La pareja formada por el costamarfileño y Castro en punta de ataque acabó traducida en los dos goles del conjunto gijonés, en un momento en el que el encuentro se había vuelto loco, y que terminaron siendo insuficientes para sumar algún punto.

Rubi parece que todavía no ha encontrado un equipo titular base que le convenza. Xavi Torres, que fue de la partida en los primeros dos partidos del entrenador rojiblanco, se cayó finalmente de la convocatoria la pasada jornada. Una lista en la que tampoco estaban Viguera y Víctor Rodríguez, titulares durante la visita a San Mamés. No ha ayudado a encontrar ese once tipo las nuevas incorporaciones, que han obligado a volver a replantear las preferencias. Vesga, el primer en llegar, ya fue de la partida el pasado domingo, mientras que Traoré tuvo sus minutos. No sería de extrañar que en Leganés debute el último fichaje, el nigeriano Elderson Echiéjilé, lateral izquierdo.

Los rojiblancos tienen la baja segura de Babin, descartado para la visita a Leganés, y también se da prácticamente por descartado a Douglas, que sigue renqueante de sus problemas de rodilla. Meré sigue entre algodones por unas molestias de pubis. El equipo vuelve al trabajo esta tarde, a partir de las 16.30 horas, en Mareo.