Las decena de peñas que se dieron cita en Vallecas añadieron color rojiblanco Vallecas el día en el que el Sporting vistió por primera vez de azul marino y mangas verdes. Un millar de aficionados saborearon con alivio el punto logrado por los de Herrera, tras hacerse oír en a grada para levantar al equipo en los peores momentos. Y es que el sportinguismo se vive intensamente en la capital. Tanto que muchos asturianos que trabajan en Madrid no se quisieron perder la visita. Es el caso de los gijoneses Alicia Álvarez y Luis García o del avilesino Diego García. Hay también madrileños que el apego les viene de herencia. Algunos ejemplos son Dani González, Jose Pérez y su hijo Mario, de la peña De Madrid al Cielo, nombre tan celestial como la sensación del empate.
