Un joven de 31 años y nacionalidad iraní mató ayer a cuchilladas a un jubilado de 65 años en el barrio bilbaíno de Santuchu e hirió a otras seis personas, a dos de ellas de gravedad, antes de ser reducido por vecinos y detenido por la Policía. Los hechos ocurrieron sobre las 09.40 horas, junto a una parada del metro, cuando el individuo comenzó a atacar con un cuchillo de cocina de grandes dimensiones a los viandantes que encontraba en su camino. Según los testigos, el joven, identificado con las siglas B. A. K., caminaba de forma errática, hablando en voz alta y con la mirada perdida, y atacó a varias personas mientras vecinos de la zona acudían en ayuda de las víctimas.
El consejero de Interior del Gobierno vasco, Rodolfo Ares, señaló que las agresiones comenzaron cuando el detenido increpó a una pareja. A partir de ahí comenzaron los navajazos en la calle, hasta que el agresor entró en un bar y mató al hombre de 65 años, vecino de Santuchu. El acoso de los vecinos llevó al agresor a refugiarse en el local y fue allí donde le asestó al hombre las repetidas puñaladas que le causaron la muerte. Según declaró el concejal bilbaíno de Seguridad Ciudadana, el fallecido intentó parar al agresor, del que no constan antecedentes policiales. La víctima mortal, identificado como K. M. O., era un maestro jubilado.
El agresor fue reducido finalmente por vecinos del barrio, que lo golpearon con una loseta de obra. Poco después fue detenido por la Policía Municipal y posteriormente puesto a disposición de la Ertzaintza. El agresor causó heridas por arma blanca a otras seis personas, cuatro mujeres y dos hombres de distintas edades.
