La ortoqueratología es un tratamiento en el que mediante el uso de unas lentes de contacto especiales semirrígidas mientras se duerme se consigue modificar la curvatura corneal del paciente de una forma controlada y dirigida.

La lente de contacto se diseña en función de la geometría de la córnea del paciente y de su defecto refractivo, de forma que cuando se quite las lentes al despertar, tras dormir toda la noche con ellas, el usuario de lentes de orto-k podrá gozar de una buena visión durante todo el día, sin la necesidad de usar gafas ni lentes de contacto. Eso sí, como el efecto ortoqueratológico es reversible, se deberá dormir todas las noches con las lentes para mantener su efecto. Como no todas las personas son candidatas a esta solución, hay que hacer un estudio de viabilidad previo.

¿Puede la ortoqueratología frenar el aumento de la miopía en niños?

Sí. La ortoqueratología puede llegar a ralentizar la miopía hasta un 45%. Hay numerosos estudios que así lo indican. Hay suficiente evidencia científica que demuestra que la ortoqueratología es una opción segura para el tratamiento y control de la miopía. Además, hay también estudios que indican que el riesgo de padecer enfermedades oculares, como por ejemplo el glaucoma, desprendimiento de retina, maculopatía miópica u otras graves enfermedades oculares, se multiplica exponencialmente cuando la miopía supera las seis dioptrías. Cuanto mayor sea el nivel de miopía de adulto mayor será el riesgo de sufrir patologías de retina.

Es interesante saber que en otros países, como Francia, Serbia, Rusia y China, entre otros, son los oftalmólogos quienes adaptan las lentes de ortoqueratología en niños para intentar frenar su miopía. En España, Italia y Estados Unidos, entre otros países, somos los optometristas quienes adaptamos este tipo de lentes.