Los drones toman altura en la Politécnica de Gijón: "Es muy entretenido"

Una veintena de participantes echan a volar sus dispositivos en el evento final de unas jornadas académicas

VÍDEO: Los drones toman el cielo en una tarde de altos vuelos en la EPI: "Es muy entretenido"

Ángel González

Una tarde de altos vuelos. Eso vivió este sábado la Escuela Politécnica de Ingeniería gracias a la gran final de las décimas Jornadas de Drones de la Universidad de Oviedo e impulsadas por la asociación "Drone4Students", que comparte su pasión por estos dispositivos. Jorge Martín, su presidente, reivindicó la cita para comprobar la destreza de los participantes, alumnos de Ingeniería Electrónica, Mecánica e Industrial. Alrededor de una veintena se reunió para disfrutar de unas horas que combinaban el entretenimiento con el aprendizaje.

"Formamos a los de primer y segundo curso en la materia para que haya ese relevo generacional", afirmó Jorge Martín. El encuentro se dividió en varias pruebas. Una consistía en una carrera tradicional en un circuito, "como si fuera Fórmula 1", decía el presidente de "Drone4Students". Eso sí, no todos a la vez. En otra, el objetivo era pinchar globos en el menor tiempo posible. La última daba rienda suelta a la creatividad y a las acrobacias. "Es algo más subjetivo", señaló Martín, para la que la mayor complejidad residía en la carrera a contrarreloj. "Es donde más se arriesga", comentó.

Mateo Pinker, estudiante de Ingeniería Mecánica, abrió la veda. Se colocó las gafas, se sentó y agarró su mando. La concentración era máxima. Al concluir, desprendía buenas sensaciones. "Había nervios, pero es algo que se disfruta", confesaba Pinker, que destacó lo "entretenido" del momento. También admitió instantes de "desorientación" a la hora de enderezar el vuelo de su dron. A su juicio, todo es cuestión de práctica. "Hay que meterle horas y acostumbrarse", subrayó Mateo Pinker, para el que la parte más ardua es pilotar el aparato más que construirlo. "Volando, si te equivocas... adiós, dron", remarcó.

César Bulnes se impuso en la carrera clásica, mientras que la lluvia chafó el colofón de las demás, que terminaron sin vencedor. No obstante, los resultados eran secundarios. Primaba mostrar todo lo aprendido. Ángela Rodríguez estaba en "boxes", ayudando a poner a punto los drones. "Me gusta más arreglar que pilotar", aseguró la joven, alumna de Electrónica y que entró en la Universidad con el propósito de adentrarse en el mundillo de la mecatrónica. "Los drones tienen muchas salidas y están mejorando a pasos agigantados", sostuvo Ángela Rodríguez, para la que a estos dispositivos "se les están encontrando aplicaciones en distintos campos". "Me puede ayudar para mi futuro laboral", declaró la joven, integrante también de "Drone4Students".

"Lo más complicado viene cuando te quedas sin señal de vídeo. Medio segundo puede suponer que el dron se estrelle contra el suelo", incidió Jorge Martín, que ejerce de "profesor" junto a otros compañeros de los más noveles en el tema. "Se hace muy buen grupo y aprender a enseñar te permite darte cuenta de muchas cosas. Los conocimientos calan mucho más", apuntó Martín. En la carpa hasta había un dron inspirado en una botella de sidra. "Llama la atención, sobre todo en Asturias", manifestó Jorge Martín, que explicó que "hay dos drones principales". "Está uno de categoría general que es más estable y para hacer fotos o trabajar en películas. Y los hay más pequeños de carreras y más potentes", desglosó.

El presidente de "Drone4Students" ensalzó el "atractivo" que tienen los dispositivos que esta tarde surcaban los cielos en el campo de vuelos de la Escuela Politécnica de Gijón. "Nos ha pasado de dar charlas y motivar a gente a estudiar Ingeniería", afirmó Martín, que reivindicó el paulatino "crecimiento" de los drones pese a que aún "no ha explotado como la Inteligencia Artificial". Jorge Martín recalcó que hubo en el proceso de creación de los aparatos mucho de "prueba y error", pero de eso se trata. "Equivocándote, aprendes más", resumió. "Hemos pasado muchas horas juntos y esta jornada es para divertirnos", completaba Ángela Rodríguez.

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