Madrid
Desde que fuera presentada, la Wii Balance Board ha sido el objeto de deseo de los numerosos fans de la consola de Nintendo, casi al mismo nivel que el famoso Wiimote cuando se mostró el primer vídeo. Por fin ayer llegó a las tiendas españolas este curioso periférico, que promete experiencias realmente innovadoras, acompañado de su primer juego específico: Wiifit, un título de fitness y gimnasia.
El invento de Nintendo no es otra cosa que un híbrido entre un step de aerobic y una báscula con su superficie dividida en dos. El sofisticado periférico inalámbrico detecta la postura del usuario mediante múltiples sensores independientes que registran en todo momento los distintos puntos de presión en ambas mitades. Así, sabe si está de cuclillas, de puntillas, inclinado hacia delante, a la pata coja o apoyado sobre las palmas de las manos. Todas estas capacidades del invento han sido plenamente aprovechadas por Nintendo en Wiifit, que se puede encontrar en un pack junto a la Balance Board por 89,95 euros. El juego es una especie de gimnasio doméstico que obliga al usuario a crear un perfil nada más iniciar la partida, introducir sus datos vitales, pesarse y obtener su índice de masa corporal (IMC).
En este punto, el «sacrificado» jugador puede elegir un plan de entrenamiento diario, como si se pusiera en mano de un entrenador personal, o elegir los ejercicios uno a uno, por puro ocio. En total son 40 el número de pruebas que se pueden afrontar, aunque no todas están disponibles en un principio; habrá que sudar la gota gorda, literalmente, para desbloquearlas. Existen cuatro tipos de ejercicios: de equilibrio -fútbol, esquí...-, aerobic -boxeo rítmico, step dance...-, tonificación -torsiones, flexiones...- y yoga -ejercicios de respiración, posturas...-. Además, uno de los incentivos del juego, además de bajar el peso y reducir el IMC, es ir mejorando su edad física, un sistema similar a la edad cerebral del famoso Brain training.
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