Las protestas de vecinos del entorno han motivado que el Ayuntamiento redujese el horario de cierre de la "Semana negra" a las 2.30 horas de domingo a jueves, una medida que afecta a los negocios instalados en el recinto del evento.

De hecho, la decisión no ha sido bien recibida por la mayoría de los hosteleros presentes en el ferial, ya que consideran que "realizamos una gran inversión y este cambio conllevará una importante pérdida económica puesto que el mayor número de consumidores llega por la noche".

Ante el cambio de horario en días laborables, la mayoría de los propietarios reclaman una disminución de la cuota que pagan a la organización por situar la carpa de su negocio en el recinto. Aún así, también hay quien cree que esta alteración horaria no supondrá un efecto demasiado negativo al ser sólo entre semana. El "toque de queda" en la "Semana negra" de domingo a jueves ya se ha estrenado y genera diferentes reacciones.