El buque escuela "Creoula", propiedad de la Marina Portuguesa, realizó ayer en la dársena de San Agustín de Avilés la última parada de un curso de verano de la Universidad Itinerante del Mar (UIM). El buque académico volverá a partir mañana con un segundo curso hasta las islas Cíes y Lisboa, pero mantendrá hoy sus jornadas de puertas abiertas al público hasta las 20.00 horas.

Román Antonio Álvarez, anterior concejal de Cultura, repite por tercera vez este año como profesor en el barco escuela. "Los alumnos aprenden de todo. Se alternan clases teóricas de Geografía o Historia con la vida rutinaria en un barco y se imparten talleres de estrategia o elaboración de nudos marineros. Es una experiencia muy completa", apunta.

El exedil y profesor, que esta última semana surcó con los alumnos las aguas de Bilbao, Santander y A Coruña, advierte de que la amenidad del curso no excluye una rutina laboriosa. "Nos levantamos todos los días a las siete de la mañana. Hicimos turnos de cocina y limpieza; en este sentido los alumnos aprenden a valerse más por sí mismos. El horario era impredecible porque nunca sabes cuándo te van a llamar para recoger velas y tirar de cabos", explica, con tono didáctico.

Conchi Escobedo, del Centro de Cooperación y Desarrollo Territorial (CeCodet) de la Universidad de Oviedo, asegura que la clave de este curso es su carácter multidisciplinar. "Las actividades son variadas y los alumnos que las realizan provienen de carreras y ciudades diferentes, lo que convierte este curso en algo muy enriquecedor", apunta.

Los nuevos alumnos del "Creoula" parten mañana, pero ayer ya tenían todas las maletas preparadas a las puertas del barco. El gijonés Álvaro Pendás, de 18 años, es uno de los estudiantes que formarán parte de este segundo curso de la UIM. "Me gusta mucho todo lo que tiene que ver con la mar. Cuando mi madre, que es profesora en la universidad, me habló de este curso, no me lo pensé dos veces", asegura. El joven es consciente de que esta próxima semana no será sencilla. "Vamos a tener que trabajar mucho, pero aprenderemos cómo es eso de vivir en un barco y cómo trabajar en equipo con personas que no conoces. Es un curso diferente, una oportunidad de aprender de forma distinta", explica.

Su compañero, Alejandro Martínez, es de Villaviciosa y está terminado un máster de abogacía. "Estuve a punto de ingresar en la Escuela Naval Militar, el mundo marinero siempre me ha llamado la atención. Estoy acabando la etapa universitaria y me di cuenta de que si no aprovecho estas oportunidades ahora no podré llevarlas a cabo nunca", afirma.

El barco abrió ayer sus puertas a todos los curiosos, que llegaron a crear colas en la entrada. Serafín González y su hijo Sergio, jugaban a meterse en una de las lanchas del interior del "Creoula". "Es la primera vez que el pequeño se sube a un barco y está frenético, es un detalle que nos dejen visitarlo", explicaba.

Antes de embarcar, los alumnos necesitan aprender algunas nociones básicas. Ayer, la primera toma de contacto se centró en una sesión de información y encuadramiento ante los nuevos tripulantes. El Centro de Servicios Universitarios de Avilés acogerá hoy a partir de las 10.00 horas dos conferencias de Román Antonio Álvarez, que hablará sobre la ría y la transformación del entorno avilesino, y de José Ramón García, director del Museo Marítimo de Asturias. La alcaldesa de Avilés, Mariví Monteserín, recibirá a los alumnos en el Ayuntamiento a las 13.00 horas.