Los más de 35.000 trabajadores del Principado recuperarán en 2015 parte del terreno perdido en materia salarial y de derechos laborales desde el inicio de la crisis pero no todo. Los trabajadores de la administración regional empezarán a disfrutar este año de la jornada de laboral de verano que tenían hasta 2012, es decir durante los cuatro meses que van desde junio hasta septiembre.
El pasado verano ya habían recuperado la jornada de verano para tres meses pero será en el ejercicio que ahora arranca cuando vuelvan a disfrutarla a lo largo de los cuatro meses, como tenían reconocido antes de la política de recortes decidida por el Gobierno central y aplicada en Asturias. La jornada de verano consiste en una reducción de dos horas y media a la semana, entre los meses de junio y septiembre. Los empleados tienen que cumplir las horas de atención al público (de 9 a 14 horas) de manera íntegra pero luego pueden repartir esa reducción de dos horas y media semanales según sus necesidades y de las del servicio en el que trabajan.
Los empleados de la administración regional también recibirán a lo largo de este mes de enero un pago equivalente, aproximadamente, a una cuarta parte de la paga extra de Navidad que les había sido suprimida en 2012. El Principado y los sindicatos de la función pública ya habían cerrado este acuerdo meses atrás y ahora la medida se hará efectiva. Los representantes sindicales intentaron arrancar a la consejera de Hacienda, Dolores Carcedo, el compromiso de que el Principado abonase más adelante, a lo largo, de este año el resto de esa paga extra, pero la respuesta ha sido negativa. El argumento de la Administración es que no hay disponibilidad de recursos para garantizar ese desembolso, que supondría alrededor de sesenta millones de euros. El Principado tampoco recuperará, al menos en este ejercicio, las ayudas al estudio que los trabajadores perdieron con los primeros recortes.
