La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Presidente de Resnova y "Empresario Leonés del Año"

Alfredo Martínez Cuervo: "El cuadrante noroeste no está suficientemente industrializado ni aprovechado"

"Nos falta unidad como la que tienen los del Levante" | "Se necesita actitud emprendedora, y empresarios que no estén junto al poder y la gran empresa"

Alfredo Martínez Cuervo, en Oviedo. LUISMA MURIAS

Alfredo Martínez Cuervo (Cudillero, 1943) es el presidente de Resnova, un grupo de implantación internacional (España, México y EE UU) con intereses en el sector cerámico, vinícola y de automoción (dueño de los concesionarios BMW y otras trece marcas). La empresa más conocida de su conglomerado es Ceranor, dedicada a la fabricación de cerámica estructural y ubicada en la localidad leonesa de Valencia de Don Juan, "en el centro del cuadrante noroeste de la península Ibérica", remarca de manera reiterada. La Federación Leonesa de Empresarios (Fele) le acaba de conceder la distinción "Empresario Leonés del Año" por "su espíritu de superación personal, su visión estratégica de los negocios y su iniciativa empresarial".

-¿Por qué cree que le premian en León y en Asturias no?

-Ésa es una gran pregunta, porque mira que yo soy asturiano y ejerzo aquí, y en México y en todas partes. Pero...

-Se fue joven a México.

-Nací en la época de la fame. Los chavales con 11 años ya iban a la mar porque no había otra salida. Yo estudié y trabajé a la vez. Quizás por eso tengo una mentalidad protestante del trabajo. Hay que estudiar y trabajar siempre, no puede ser que tengamos "ninis". No tenemos jóvenes que aprendan oficios. Yo no soy político, nunca lo he sido ni me gusta la política. Pero en Alemania vi la escuela de FP de Augsburgo, en Baviera, con unas máquinas extraordinarias y unos muchachos con mucho interés y ganas de aprender. Ésa es la base de la gran industria alemana. ¿Y aquí? Estudié dos carreras, un máster de los de verdad y he tenido muchos oficios. En marzo cumpliré 76 años y sigo trabajando, por ética y por moral, porque tengo la obligación de hacerlo. No estoy jubilado ni pienso, moriré con las botas puestas.

-¿Qué opinión le merece la constitución de la Plataforma del Noroeste?

-Ceranor está en Valencia de Don Juan por dos motivos. Uno, porque hay la mejor arcilla, y dos porque está en el centro del cuadrante noroeste peninsular. El Noroeste no está suficientemente industrializado ni aprovechado. Por ejemplo, ¿por qué no se aprovechan los puertos gallegos, que son naturales y extraordinarios, para las relaciones comerciales con América? Los puertos de Rotterdam y de Amsterdam son fantásticos, ¿por qué aquí no ha habido ni políticos ni empresarios que hayan promovido cosas así? El Noroeste no ha sabido atraer empresas. La comunidad autónoma lógica y más potente hubiera sido la conformada por Asturias, Cantabria y Castilla y León. Tendríamos costa y terreno llano suficiente para la implantación de empresas.

-¿Y las conexiones aéreas?

-El aeropuerto de Asturias necesita más conexiones y actividad, y necesitamos que llegue ya el AVE. El Noroeste tiene deficiencias importantes y nos gustaría que la sociedad exija al Gobierno que las atienda, porque tenemos historia y personas lo bastante importantes como para que se nos tenga en cuenta.

-Las patronales de Asturias, Castilla y León y Galicia destacan ahora su unidad.

-Ésta es la primera vez que los empresarios se unen para hacer algo, y lo aplaudo porque es muy importante para la economía de esta zona y pueden contar conmigo. Es que uno de nuestros problemas es que nos falta unidad, como la que tienen los del Mediterráneo, los del Levante. Nos faltan emprendedores y que los hijos, la segunda y la tercera generación, entiendan que el empresario es un trabajador, no un "riquillo".

-¿Cómo ha conseguido librar las crisis en América y en España?

-Hay que estar preparados. Yo sabía que venía la crisis porque no era normal fabricar en Ceranor para 800.000 viviendas al año en los años 2006 y 2007. Sabía que aquello no podía ser y, efectivamente, ocurrió. El problema es que en vez de una caída suave fue una ruptura brusca. Si era evidente que la crisis iba a llegar, ¿por qué no se prepararon los empresarios, las cajas de ahorro??

-Asturias tardó más en sufrir la crisis, pero le cuesta también más recuperarse.

-Asturias era una de las comunidades más ricas de España. Tuvimos la desgracia de tener la minería y la siderurgia, que daban mucho dinero y permitieron que la gente viviera muy cómodamente. Y después llegó la reconversión y con ella las prejubilaciones bien pagadas, ¿y qué pasó? Que no había espíritu para emprender porque todo el mundo estaba acomodado, y volvemos a lo mismo, chavales que no se formaron en oficios y los que estudiaron fueron todos a la Universidad; no se hizo política para atraer empresas? En América al español se le definía por ser honrado y trabajador. Pero ahora nos faltan actitud emprendedora y empresarios que no estén junto al poder y la gran empresa.

-Dice usted que los jóvenes que estudiaban optaban todos por la Universidad y no por los oficios. ¿Eso es malo?

-El problema es que la Universidad tiene que estar más relacionada con el mundo de la empresa. No lo está. Todo el sistema educativo tiene que cambiar y es la sociedad la que tiene que tomar la decisión y hacerlo. Si me llaman, estoy dispuesto a dar charlas y a colaborar con la Universidad, porque necesitamos esa relación.

-¿Tiene usted mucho trabajador eventual?

-Todos mis trabajadores son fijos. No quiero eventuales. Siempre les digo que las empresas no son mías. Cuando me muera no me las voy a llevar conmigo al otro lado, ni las empresas ni nada. En realidad, todas son de ellos, porque viven de su trabajo ahora y van a tener que seguir viviendo de ello, si quieren, claro, cuando yo no esté.

Compartir el artículo

stats