La negativa del Principado a apoyar la implantación del grado de Ciencias de la Gastronomía y las Artes Culinarias en Asturias ha puesto en pie de guerra al sector turístico y provocado un profundo malestar entre los grandes chefs de la cocina regional: los estrella Michelin. "No sé con qué parte del cuerpo piensan estos políticos, pero con la cabeza no", sentencia rotundo Pedro Morán, propietario del prestigioso restaurante Casa Gerardo, la "estrella" con más solera del Principado (1986).
La aprobación del grado de Ciencias de la Gastronomía y las Artes Culinarias se cayó del orden del día del ultimo Consejo Social de la Universidad por falta de consenso. Su aprobación era el paso previo para su envío al Gobierno regional, que se esperaba que diera el visto bueno, lo que permitiría implantarlo en el próximo curso. Pero precisamente el veto del Principado fue lo que hizo que se retirara.
Previamente, el rector de la Universidad de Oviedo, Santiago García Granda, y el consejero de Educación, Genaro Alonso, habían mostrado sus discrepancias incluso en público. Mientras la institución universitaria aprueba el proyecto, el responsable político del área educativa lo rechaza. La razón alegada es que el Principado apoya la Universidad pública, y por eso se ha dado el visto bueno a la rebaja de tasas, lo que sería contradictorio con dar luz verde a un grado en la Facultad de Turismo de Oviedo, que es adscrita a la Universidad, lo que se traduce en que es un centro concertado en el que hay que pagar. Según el Gobierno, esto sería dar el primer paso hacia la privatización. Según la Universidad, las condiciones son idénticas a las actuales, y similares a las de la Escuela de Enfermería de Gijón y la del Padre Ossó. Lo único que cambia es que en lugar del grado de Turismo se impartiría el grado de Gastronomía.
El resultado de este enfrentamiento de despachos supone que el proyecto se haya paralizado y se corra el riesgo de que no se implante, lo que ha provocado un monumental cabreo en el sector turístico y gastronómico de la región, desde el que se acusa al Principado de favorecer que los jóvenes emigren a otras regiones limítrofes a cursar unos estudios con alta demanda, y a la vez perder la oportunidad de atraer talento a la región.
José Luis Yzuel Sanz es presidente de la Federación Española de Hostelería (FEHR) y buen conocedor de la restauración y el turismo asturiano. "Cada día es más necesario en este sector tener estudios superiores en gastronomía y hostelería porque estamos en una dinámica de exigencia que obliga a una mejora continua, con formación en altas capacidades y tecnología. La experiencia con centros formativos de alto nivel en otras comunidades no sólo es de éxito, sino que la demanda de plazas es elevada, viene gente de todo el mundo a formarse y el índice de colocación es del cien por ciento".
Para Yzuel Sanz, "lo que está ocurriendo no lo comprendo. Asturias tiene un potencial turístico elevadísimo, en el que además está implicada toda la región y todo el mundo sabe que la gastronomía es fundamental. No entiendo el problema pero tienen que dialogar porque la apuesta de futuro está clara".
El chef Pedro Morán asegura que "la necesidad de implantar esos estudios es evidente, porque uno de los atractivos turísticos de esta región es precisamente su cocina, con enorme prestigio y proyección y que tiene que contar con personal altamente cualificado. Que me expliquen qué otro sector tiene el potencial a corto, medio y largo plazo que tenemos en éste. No sé con qué parte del cuerpo piensan estos políticos, pero con la cabeza no". E indignado añade: "Será mejor que las familias les paguen los estudios a sus hijos aquí que hacerlo para que se vayan a otras regiones. Y además, sería una manera de importar talento, de atraer a personas de otras regiones y hasta de otras partes del mundo. Pero aquí, en vez de buscar oportunidades con alta formación en un sector de futuro, lo que hacen es echarlas, en un momento en el que la economía de esta región ya no es ni de segunda división".
Marcos Morán, su hijo y socio y propietario de la cadena de restaurantes Hispania, con locales en la "city" londinense y en Bruselas, es de la misma opinión. "Se necesitan esos estudios. Me sentiría muy orgulloso como profesional y como asturiano porque seguro que atraerían a estudiantes de España y también de Latinoamérica, que ahora se están yendo a otras regiones a formarse. Es una pena desaprovechar una oportunidad que si se viera con ojos de crecimiento económico y no de siglas políticas, seguro que salía adelante".
El chef José Antonio Campoviejo, dueño de El Corral del Indianu, también estrella Michelin, asevera que "lo que están haciendo desde el Gobierno regional es un ataque permanente al turismo, aunque digan lo contrario, y al crecimiento de la economía. Primero las comunicaciones, los aviones, y ahora esto. Asturias es una provincia turística y gastronómica, y necesita profesionales altamente cualificados. Dicen que no quieren los estudios porque es privatizar. Muy bien, pues que los estudiantes vayan a formarse y a crear riqueza a otras regiones y aquí sigamos en la pobreza y sin aprovechar oportunidades. Parece una guerra constante contra los empresarios y los ricos, cuando son los que generan economía", sentencia el prestigioso chef.
