El móvil para los niños, por contrato. Ésa es la propuesta de la Fundación Anar, Ayuda a Niños y Adolescentes en Riesgo, ante el auge del uso de teléfonos por parte de menores. Tres de cada cuatro niños asturianos de entre 12 y 15 años tienen teléfono móvil. El 98 por ciento usa internet y el 89,3 por ciento utiliza habitualmente el ordenador, según los Indicadores de Seguimiento de la Sociedad de la Información del Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital. Niños y pantallas es un binomio ya indivisible, por lo que, según los expertos, es una batalla perdida luchar contra los elementos. Así que lo mejor es enseñarles a utilizar los dispositivos móviles haciendo un buen uso de ellos. La Fundación Anar ha ideado un "Contrato para el buen uso del teléfono móvil", que consta de diecinueve puntos a los que se compromete el menor cuando se le entrega su "mayor objeto de deseo", según expertos de distintas disciplinas.
A lo largo del documento se indica claramente que los padres deben y pueden tener acceso al móvil y a su contenido, y que tendrá una aplicación que les permitirá controlar a qué páginas o qué contenidos se descargan. Aunque también se indica a los menores que no podrán descargar ninguna aplicación ni juego sin permiso previo. Tampoco se podrá llevar al colegio ni hacer compras. Habrá unas horas de uso y en ningún caso deberá sustituir las relaciones sociales con la familia y los amigos.
Examen a los padres
Pero además, los padres deberán informar a sus hijos del riesgo que conlleva contactar con personas a las que no conocen, facilitar datos personales y compartir fotografías, tanto suyas como de otras personas. La Fundación Anar no se queda ahí, y plantea a los padres que antes de someter a los pequeños a la tarea de explicación, debate y comprensión de las condiciones que supone tener un móvil, es necesario que ellos mismos se examinen previamente de sus propios usos y costumbres con el teléfono móvil.
Y les plantea que se hagan preguntas concretas: "¿Qué uso haces tú, adulto, de las tecnologías? ¿Cuántas horas destinas? ¿Para qué las empleas? ¿Cuando estás compartiendo tu tiempo con la familia y los amigos estás más pendiente del móvil que de la conversación?". Otras cuestiones se refieren a la atención que se presta a los menores, si saben para qué necesitan el móvil, el tiempo que pasan jugando con videojuegos, si lo hacen individualmente o en red. Y también sobre sus relaciones sociales, si tienen dificultades, si comparten su ocio con otras personas, durante cuánto tiempo y con quién.
"Debes saber que tú eres el modelo de referencia para ellos y que la gestión correcta del móvil y las tecnologías empieza por ti mismo", advierten desde la Fundación Anar. Y señalan que los menores, "para aprender a ser autónomos y gestionar bien su tiempo, deben saber los límites en los que se pueden mover. Esto les evitará una ansiedad difícil de controlar".