En la detención de los cuatro presuntos autores del crimen del concejal de Llanes participó ayer el Grupo Antiterrorista Rural de la Guardia Civil (GAR) del País Vasco. Decenas de agentes pertenecientes a este cuerpo y a la Unidad Central Operativa (UCO) realizaron los registros en cuatro viviendas de Bilbao, Amorebieta y Erandio. El amplio despliegue da una idea de lo peligroso que fue el desenlace de esta operación, bautizada con el nombre de "Caleya" (del alemán "Strasse", que significa camino o calle). La Delegada del Gobierno en Asturias, Delia Losa, felicitó a los agentes de la Guardia Civil de Gijón que capitanearon durante seis meses la investigación por la muerte de Javier Ardines.

"Esta investigación había producido mucha presión y preocupaba a toda la sociedad en general", reconoció Losa en la Junta Local de Seguridad que convocó ayer la alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón, por la oleada de atracos en La Calzada. El teniente coronel de la Comandancia de la Guardia Civil de Gijón, Francisco Javier Puerta, manifestó que la investigación "fue muy compleja", pues se trataron "muchos datos con mucha paciencia y muy buen trabajo". Con el dispositivo de ayer los agentes dan por finalizada la operación "Strasse", llamada así por dos razones. La primera, a Ardines lo asesinaron el 16 de agosto en un camino, en las inmediaciones de su domicilio en Belmonte de Prias, en Llanes. Y segundo, uno de los detenidos fue arrestado en Suiza por petición de la UCO.