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Los médicos reciben las papeletas horas después del cierre del voto por correo

l La junta electoral desoye a Martínez y rechaza aplazar los comicios | Antuña atribuye los retrasos a los errores de la lista de su oponente

Candidatos a presidir el Colegio de Médicos de Asturias

Los médicos asturianos comenzaron a recibir ayer martes, por correo postal y correo electrónico, las papeletas de las candidaturas y el resto de la documentación oficial relativa a las elecciones a la junta directiva del Colegio de Médicos, que se celebrarán pasado mañana, viernes. El dato no tendría mayor trascendencia de no ser porque en la medianoche del lunes al martes ya había quedado cerrado el plazo para ejercer el voto por correo. Algunos facultativos pudieron votar días atrás con papeletas que tuvieron que ir a recoger a la propia sede colegial, donde sí estaban disponibles. Y es que, en todo caso, para ejercer el voto por correo era necesario acudir previamente a la secretaría del Colegio para acreditar “la coincidencia de firma”.

Pese a todo, la junta electoral de la institución colegial dictaminó ayer por la tarde que se mantenga el plan previsto, y que este viernes se celebren las votaciones a las que concurren las listas encabezadas por el pediatra Venancio Martínez Suárez y el urgenciólogo Luis Antuña Montes.

La candidatura de Martínez había reclamado anteayer el aplazamiento de las elecciones apelando a “la seguridad de los votantes” (frente a posibles contagios) y al “abstruso procedimiento del voto por correo, injustificadamente lleno de dificultades para su ejercicio”. Sobre esta base, proponía diferir los comicios y habilitar el voto telemático, algo que “podría hacerse en pocos días”, para solventar los problemas en los que fundamentaba su petición de aplazamiento.

Entre tanto, la candidatura de Antuña expresó su oposición a la demanda de sus adversarios: “Las reglas de juego son las mismas para todos desde el inicio del proceso electoral. Pedir cambios en la prórroga no se sostiene”. Según el urgenciólogo del HUCA, “la junta electoral es la única que tiene autoridad para responder cualquier tipo de reclamación”. “Determinar la seguridad de la votación es potestad de la autoridad sanitaria, que no ha prohibido celebrar las elecciones”, argumentó la candidatura de Antuña.

Y lo que la junta electoral hizo ayer fue publicar una resolución en la que asegura que “se cumplirán con rigor todas las medidas necesarias para garantizar la seguridad de los votantes durante el acto de votación en las sedes colegiales dispuestas para ello”. El órgano electoral precisa que este procedimiento está regulado por una resolución de la Consejería de Salud del Principado del 19 de junio de 2020.

¿Qué dicen los estatutos del Colegio de Médicos con relación al voto por correo? La normativa viene recogida en el artículo 17, en el que se expone el procedimiento electivo. El epígrafe 6 indica lo siguiente: “Si el elector, previendo que en la fecha de votación no se hallará en la localidad donde le corresponde ejercer su derecho de voto o que no pudiera personarse en su mesa electoral el día de la votación, decide ejercitar su derecho al voto por correo podrá hacerlo desde el momento en que se proclamen los candidatos por la junta electoral y hasta 72 horas antes de las 0:00 horas del día correspondiente a la votación”.

O sea, que las papeletas y el resto de la información oficial del proceso electivo llegaron unas horas después del cierre del plazo estipulado para votar por correo. Y no a los aproximadamente 6.500 médicos que están colegiados en la región, pues es bien conocido que los envíos postales están sujetos a muchas vicisitudes de diversos tipos. Antes de ese momento, la información de la que disponía el cuerpo electoral era oficiosa y les había llegado a través de los medios de comunicación o de otras vías. Otra opción viable era acudir a las dependencias colegiales, informarse, recoger papeletas, acreditar la firma y votar por correo.

¿Por qué esta demora en el envío? Según fuentes de la candidatura de Luis Antuña, “el retraso se ha debido a reiterados errores manifiestos en la presentación de la candidatura de Venancio Martínez, que han obligado a la junta electoral a retrasar el envío”. En las filas del urgenciólogo también se argumenta que Venancio Martínez fue vicepresidente del Colegio en los últimos cuatro años, lo que le impide desligarse del mecanismo electoral como si fuera ajeno a su gestión.

Según los estatutos colegiales, el elector que desea emitir su voto por correo debe solicitar en el periodo antes indicado de la secretaría del Colegio “la certificación que acredite que está incluido en las listas del censo”. Esta solicitud “deberá formularse personalmente en el impreso adecuado que estará numerado”. “En ese momento –precisan los estatutos– se le exigirán al interesado la exhibición de su DNI y se comprobará la coincidencia de firma”.

Este mecanismo se incluyó en los estatutos para evitar problemas como el acontecido en las elecciones de 1994. El voto por correo se convirtió en la manzana de la discordia en los comicios a los que concurrieron a la presidencia el pediatra Jorge Valdés-Hevia y el reumatólogo Baltasar Palacios. Lo que sucedió entonces fue que llegaron por correo 373 votos que el secretario general saliente (que volvía a concurrir a las elecciones y tenía la atribución de arbitrar el voto por correo) decidió anular porque, al cotejar firmas, determinó que la rúbrica que en ellos figuraba no coincidía con la que estaba en la ficha de colegiado. Esos votos presumiblemente favorecían a Baltasar Palacios, que resultó derrotado por una diferencia de 93 sufragios. O sea, que los anulados fueron decisivos.

El proceso llegó a los tribunales, y dos años y medio después el Tribunal Superior de Justicia de Asturias dio por buena la anulación de los votos al concluir que la mayor parte de las firmas cotejadas con las de los registros del Colegio «resulta altamente sospechosa y, por lo tanto, rechazables como auténticas por un tercer diligente».

La introducción en los estatutos de la necesidad de acreditar la firma tenía como objetivo que se repitiera una irregularidad de similar naturaleza.

“las reglas de juego son las mismas para todos desde el inicio del proceso”, que “pedir cambios en la prórroga no se sostiene” y que determinar la seguridad de la votación “es potestad de la autoridad sanitaria”.

Justifica su petición de posponer el procedimiento apelando a “la seguridad de los votantes” (frente a posibles contagios) y al “abstruso procedimiento del voto por correo”. Pide habilitar el voto telemático.

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