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Así serán las normas de la EBAU en Asturias: mascarilla FFP2 y pelo recogido

Los alumnos deberán notificar que su estado de salud es bueno y los correctores pondrán los exámenes en cuarentena un mínimo de 3 horas

Participantes en la EBAU del año pasado, en el Palacio de los Deportes de Gijón. Ángel González

Más de 4.000 jóvenes asturianos se enfrentarán en un mes –del 8 al 10 de junio– a la EBAU de la mascarilla y el distanciamiento. El desarrollo del examen más multitudinario del curso será muy similar al del año pasado: los estudiantes tendrán que llevar el pelo recogido, no podrán compartir bolígrafos ni apuntes, deberán lavarse las manos antes y después de cada prueba y tendrán que ir a pie desde las proximidades de las sedes, que son un total de dieciséis, dos más que en 2020. Quizá la novedad más destacada de este año es que los aspirantes estarán obligados a llevar todo el rato –incluso durante el examen– la mascarilla, que será “preferentemente” de tipo FFP2.

El protocolo elaborado por la Universidad de Oviedo, que es la organizadora de la EBAU, prohíbe la entrada de familiares a las sedes, advierte a los tribunales que los exámenes tendrán que guardar una cuarentena de “como mínimo tres horas” antes de ser corregidos y anuncia que habrá personal de seguridad dentro de los centros y miembros de las fuerzas de seguridad en los exteriores para vigilar que las medidas de distanciamiento se cumplen.

Esta es la guía para seguir todas las medidas de seguridad de la Selectividad frente al coronavirus. Por supuesto, no podrán presentarse los estudiantes con síntomas compatibles al covid. El vicerrectorado de Estudiantes, con Alfonso López Muñiz a la cabeza, establecerá “un procedimiento mediante el cual tanto el alumnado como el tribunal y los cuidadores notifiquen que se encuentran en buen estado de salud para participar en las pruebas”.

Llegada a la sedes

La Universidad de Oviedo recomienda a los bachilleres de la región que se acerquen a pie desde las proximidades de las sedes para evitar “problemas de aparcamiento, congestión de vehículos y aglomeraciones en la entrada de los recintos”. Si los candidatos vienen acompañados, el familiar no podrá bajarse del vehículo ni acceder “en ningún caso” al interior de las sedes. Una vez allí, los alumnos serán organizados en filas, sin formar grupos y guardando siempre la distancia de metro y medio. Habrá en todos los recintos personal de seguridad y miembros de las fuerzas de seguridad para vigilar que esas distancias mínimas se cumplen.

Entrada al examen

Se facilitará la entrada a las sedes por varios puntos si el número de alumnos es numeroso. Para que ese acceso se realice “de forma tranquila y organizada”, los responsables de la prueba citarán con tiempo suficiente, “en función del número de estudiantes, siendo menor en aquellas sedes con una participación más reducida”. El curso pasado la Universidad mandó, con carácter general, estar en las sedes hora y media antes de los exámenes. En las aulas habrá cartelería que recuerde a los alumnos las medidas higiénicas básicas de prevención que deben cumplir. Serán llamados de uno en uno y deberán presentar la acreditación, mostrándola pero sin llegar a entregarla. Se lavarán las manos con gel hidroalcohólico y ocuparán la mesa indicada.

Durante la prueba

La mascarilla es obligatoria. Todos los asistentes, en caso de llevar el pelo largo, deberán recogerlo en una coleta o en un moño para evitar tocarse la cara al retirarlo. No podrán compartir en ningún momento objetos personales, como bolígrafos, móviles, bebidas, libros, documentos, productos de aseo, toallas o cosméticos. Por lo que la Universidad recomienda llevar material de repuesto, fundamentalmente, bolígrafos. Las mesas estarán situadas a una distancia de como mínimo metro y medio. Si algún alumno tiene dudas, deberá levantar la mano y un profesor se acercará a su sitio, pero guardando las distancias.

Salida de las sedes

Se harán de forma organizada, como las entradas. Una vez finalizado el examen, lo primero que deberán hacer los aspirantes será lavarse nuevamente las manos con gel hidroalcohólico. El acceso a los baños estará controlado y en las pausas estará prohibido formar corrillos. El distanciamiento físico hay que respetarlo en todo momento.

Ventilación y limpieza de los espacios

Durante los exámenes, habrá ventilación cruzada en todas las aulas. Esto quiere decir, que se abrirán puertas y ventanas opuestas o, al menos, en lados diferentes de la sala, para “favorecer la circulación de aire y garantizar un barrido eficaz por todo el espacio”. Además, los encargados de las instalaciones de las sedes “tomarán las medidas oportunas en los protocolos de mantenimiento para garantizar el mayor aporte posible de aire exterior en los horarios de uso de los edificios y, al menos, una hora antes y después del cierre de los mismos en aquellos locales que cuenten con ventilación forzada”. Por su parte, la limpieza y desinfección de los locales y de las superficies en contacto con las personas “tiene que ser frecuente, incluyendo una limpieza previa al inicio y otra al final de la jornada”. El personal de limpieza “deberá llevar el correspondiente equipo de protección y, tras cada labor, los materiales empleados y los equipos utilizados serán desechados de forma segura”. Se hará especial hincapié en barandillas o pasamanos, mesas, sillas, suelos y grifos.

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