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Barbón cierra ciclo para iniciar el objetivo de la reactivación económica de la región

“Volvería a hacer lo mismo”, afirma el Presidente sobre su gestión de la crisis sanitaria, que sustentó en la “solidaridad frente al individualismo”

El presidente del Principado, el socialisa Adrián Barbón, contrapuso ayer la Asturias de la solidaridad frente a los criterios individualistas para explicar su criterio político a la hora de gestionar la pandemia del coronavirus. En su discurso con motivo del congreso de la UGT, Barbón hizo balance de “más de un año volcados de lleno en la contención de la pandemia”. A las puertas del fin del estado de alarma, con la pandemia contenida gracias al “avance de la vacunación, que tan bien se está haciendo en Asturias”, Barbón admitió que podrá haber opiniones discrepantes sobre su gestión de este periodo.

“El juicio no es fácil; hay muchísimos factores que ponderar, desde la capacidad asistencial a la agilidad a la hora de tomar medidas para frenar los contagios. Cada uno de vosotros tendrá su opinión. Asumo que habremos cometido errores a lo largo de estos meses; muchos, sin duda”, aseguró Barbón. Pero a renglón seguido expuso los motivos por los que él se siente “muy orgulloso”. “En primer lugar, de nuestro sistema de salud; en segundo, y sin rodeos, de que el Gobierno de Asturias haya antepuesto siempre la salud y la vida a cualquier otra prioridad”, indicó.

Barbón volvió a conjurar la disyuntiva entre salud y economía: “Pensé que nadie se atrevería a plantearla”, dijo, pero considera que aún permanece en España “como si aún no hubiera pruebas suficientes de que el control de la epidemia es el mejor impulso para la economía”.

El Presidente recalcó que “el Gobierno de Asturias volvería a hacer lo mismo, a proteger la salud de nuestros mayores, a garantizarles que, sea cual sea su edad, podrán recibir asistencia hospitalaria”, y a “aplicar las medidas que fuesen necesarias para salvar vidas”.

Apelando a su pasado minero, recalcó: “No entiendo Asturias sin la solidaridad”. “Yo no quiero una Asturias construida en el individualismo, basada en el sálvese quien pueda de la ley del más fuerte”. Y con un guiño al eslógan de “libertad” empleado por la popular Isabel Díaz Ayuso en Madrid, Barbón aseguró que quiere una Asturias “libre, y también igual y justa”.

Un tiempo nuevo

“Desde esta ventana a la esperanza que nos da la inmunización también nos podemos asomar al futuro”, dijo el Presidente para referirse a los retos inminentes que encara Asturias. Aseguró que perseguirá buscar “los acuerdos más amplios posible”. Y ante las incertidumbres por la crisis causada por la pandemia y la doble transición energética y digital, Barbón aseguró a UGT entender “las movilizaciones en apoyo a la industria” o la preocupación “por el cierre de pequeñas empresas o el desempleo”. Pero instó a “no dejarse arrastrar por el derrotismo, el camino tan trillado de quienes se empeñan en negar el porvenir a Asturias”.

A juicio de Barbón, hay motivos para la esperanza: “2021 será el año de la recuperación económic de Asturias” si se consigue “controlar y superar la pandemia”.

En este sentido, apeló a la oportunidad que suponen los fondos europeos de recuperación, y aseguró que tras las comparencias que tendrán en el parlamento los consejeros la próxima semana quedará “rotundamente claro que Asturias no llega tarde a ningún sitio”. Barbón consideró fundamental en ese proceso la colaboración público-privada.

La alocución conclyó proclamando que su gobierno “erstá en la primera línea de la defensa de los intereses de Asturias, por encima de cualquier potra consideración” y pidió “no caer en el error de la relajación apresurada” de las precauciones sanitarias para lograr el objetvio de este año: “la reactivación social y económica de Asturias”.

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