El secretario general de Vox, Javier Ortega Smith, Ortega Smith, visitó ayer la mesa informativa que la formación morada había instalado en la plaza del Marqués de Gijón, junto a la conocida estatua de Pelayo, para lanzar un duro ataque al gobierno autónomo y nacional socialistas. En la cita, que acabó con toda la comitiva en silencio escuchando un himno de España –aunque a muy poco volumen por un fallo en los altavoces–, el secretario se mostró seguro: “Asturias tiene una alternativa verde; Vox ha llegado para quedarse”. Sus afiliados le despidieron entre “vivas” a Asturias y a España.
José María Figaredo, diputado nacional de Vox y también presente, agradeció a los presentes “ir a contracorriente”. Citó varios ejemplos. “Hoy en día somos el único partido que se opone a la oficialidad del bable, la imposición de una lengua inventada que no es la lengua materna de ningún asturiano. Nuestra lengua es el español, que es la que nos une a todos”, razonó. “Decídselo a aquellos que no lo tengan tan claro. Decidles que el objetivo es dar trabajo a los amigos socialistas de Barbón”, añadió.
Ortega Smith, por su parte, criticó “el panorama asturiano de la izquierda totalitaria” que está “alejando a Asturias del proyecto común de España”. “Y ya están ahí los traidores de Foro para ir en su auxilio”, aseveró. Censuró también la “anormalización lingüística y la ideología de género” de la izquierda, y también se reservó críticas contra la protección del lobo. “Asturias necesita ganaderos. Está muy bien proteger a las plantas y a los animales, pero también estamos las personas”, zanjó.