Los conductores, aliviados por el fin de la huelga de la ITV en Asturias: "Ya no hay que ir fuera"

Las estaciones recuperan poco a poco la normalidad sin colas ni grandes problemas entre los usuarios después de tres meses de paro

Mariola Riera, Tania Cascudo, Andrés Velasco, Noé Menéndez y Chema Ordóñez,

Alivio. Sobre todo, alivio de que las cosas vuelvan a la normalidad. Fue la sensación general de los conductores este viernes en las estaciones de Inspección Técnica de Vehículos (ITV) de Asturias, que poco a poco recobran la normalidad después de tres meses de huelga al que puso fin el acuerdo con el acuerdo entre el Principado y el comité de empresa. En líneas generales los trabajadores ven mejoradas sus condiciones laborales, si bien el aumento de plantilla queda en el aire.

No fue una jornada de intenso trabajo en las ITV, donde no hubo muchas colas ni tampoco gran malestar entre los conductores, contentos por poder pasar la revisión o lograr cita en tiempo y forma. La huelga ha dejado más de 33.000 vehículos pendientes de la inspeccionar.

En la ITV de Mieres, el goteo de vehículos fue incesante: unos a pasar la revisión y otros a pedir cita. No hubo mucha gana de hablar de la huelga entre los usuarios. Por las instalaciones del polígono de Fábrica de Mieres pasó este viernes Eladio Suárez. "La verdad es que a mí no me afectó, porque saco la cita de año en año, y tuve suerte de que no me coincidió con la huelga", señaló cuando salía con su furgoneta del centro. "No se nota más movimiento que antes, la verdad es que los tiempos de espera y de la revisión son los mismos, o al menos así me lo ha parecido", aseguró el hombre. Y dejó una queja sobre el precio: "Lo que puedo decir es que es muy cara, casi 43 euros me acaban de cobrar".

Otros vecinos, aunque hablaron, no quisieron identificarse. Caso de un conductor que llegó solamente a coger cita para pasar la revisión: "La había mirado por internet, y me daba para septiembre, cuando a mi me caduca la ITV en abril". En la oficina halló la solución: "Me han dado cita para el mismo día que me caduca, así que podré pasarla a tiempo".

"Todo ha vuelto a la normalidad. En media hora me han despachado". En Avilés las personas que fueron a pasar la ITV en el primer día de normalidad se mostraron muy satisfechas. "Pedí la cita hace un par de meses y dio la casualidad de que justo hoy me tocó", apuntó Luis Méndez, que confiesa que todo ha ido según lo esperado. "Llegué a la una y ya estoy acabando. Solo ha pasado media hora". Además, este avilesino es propietario de un taller donde se realizan revisiones de ITV, aunque no ha notado excesivo cambio: "Veo a la gente más contenta porque ahora ya no tiene que irse fuera. Aquí hay muchas estaciones y ahora por fin pueden ser atendidos".

Esta normalidad le ha venido como anillo al dedo a Enrique Fernández. "Mañana (por hoy) me caducaba la ITV. Pedí cita en enero y me la dieron para abril. Tuve que pedir una cita en espera, para que me avisasen si había un hueco, y justo me llamaron y arranque para aquí como un cohete", explica antes de hacer los últimos chequeos. "Menos mal que todo se ha solucionado, tendría un grave problema, porque aunque solicites la cita te pueden multar igual", añade. Por su parte, Daniel Pérez, uno de los técnicos que trabaja en la ITV de Avilés, no ve una gran diferencia. "No nos han comentado nada. Alguno de los que viene pregunta, por poca cosa", comenta. Sobre la afluencia de coches asegura que "no hay diferencia".

Más normalidad en la ITV de Siero, ubicada en el polígono de Natalio (Granda), tras el acuerdo para acabar con los tres meses de huelga intermitente en la empresa Itvasa.

"Yo no he tenido problema alguno. Me han atendido el día que tenía reservado y con un retraso que no llegó ni a la hora", afirmó Ángel Guerrero, conductor vecino de Colloto. De forma similar se expresó Sergio González, también de Colloto. "Yo lo veo todo normal", indicó. Carlos García, de Pola de Siero, tuvo que esperar un par de meses para pasar la ITV, "porque tampoco me corría mucha prisa". Fue atendido "a la hora prevista, sin que haya notado diferencias con otros años". "A mí me parece que todo está normal", añadió el conductor, antes de destacar que el final de los paros supone, en todo caso, un alivio. "La situación se podría haber complicado mucho", aseguró. Enrique González, de Oviedo, también celebró que se haya acabado la huelga. "Espero que sea bueno para los trabajadores también", apuntó, antes de subrayar que "se están dando citas para entre dos y tres meses, pero la verdad es que cuando te llaman todo va con la máxima normalidad".

Quien no tuvo que esperar nada fue José Luis Iglesias, vecino de la localidad sierense de Aramil. "El jueves por la tarde encontré por internet un hueco para las doce del mediodía de hoy y aquí estamos", señaló con satisfacción.

A la una de la tarde de este viernes apenas había actividad en la ITV del polígono de Jarrio, en Coaña. Los pocos usuarios que se acercaron a pasar la revisión a su vehículo explicaron no tener problemas para conseguir las citas. Es el caso de una vecina de Villapedre que indica que pidió la semana pasada y ya tuvo hueco para esta semana. "Sabía que había huelga, pero no qué se había desconvocado. Yo la verdad es que no tuve ningún problema", señala. El coañés Alberto Martínez pidió cita con suficiente antelación y tampoco tuvo ningún problema.

Muy cerca estaba el valenciano afincado en Pravia Carlos Banacloche, que sí tuvo más problemas para lograr cita. "La pedí hace dos meses y vengo desde Pravia porque en Avilés no lograba. Me parece genial que se haya resuelto el conflicto porque esto es una comedia", celebró.

El PP pide que dimita Roqueñí por su "desastrosa gestión" de la huelga en la ITV

El diputado regional del PP Rafael Alonso pidió ayer la dimisión de la consejera de Transición Ecológica, Industria y Desarrollo Económico, Nieves Roqueñí, por la «desastrosa» gestión en el conflicto de la ITV con más de tres meses de huelga: «Ha sido una gestión caracterizada por la dejadez, la inoperancia y la irrelevancia», subrayó Alonso. «Si no dimite, debería cesarla Barbón, que ya prescindió de ella en la solución del conflicto y le ha dejado el papel de mera presentadora de un plan de choque cuyo contenido nadie ha explicado aún». Alonso señaló además que, aunque el PP se alegra del fin de la huelga, se trata de «un cierre en falso» y afirmó que el conflicto puede repetirse en el futuro. Por ello los populares plantearon impulsar un modelo mixto para las inspecciones de vehículos.

El presidente del PP asturiano, Álvaro Queipo, afirmó que su «teoría» sobre el conflicto es que «el PSOE ha utilizado como rehenes a todos los asturianos para librar una guerra interna en el partido entre familias socialistas». «Podían haber terminado mucho antes el conflicto», dijo, y afirmó que el propio Gobierno empuja a Roqueñí a que dimita: «Le aconsejo que no espere a que la aparten del cargo», recalcó.

El Gobierno afirma que el acuerdo no implicará ninguna subida de tasas

El consejero de Hacienda y portavoz del Ejecutivo, Guillermo Peláez, reconoció ayer que algunos colectivos «esperaban que la resolución del conflicto de la ITV terminase de otra forma, quizás más favorable a sus intereses», pero recalcó que lo importante es que el problema «se ha solucionado y que el perjuicio ha terminado para todos los asturianos».

Peláez afirmó que se abordará ahora el plan de choque para recuperar cuanto antes la lista de espera. «Creo que es una noticia positiva que debería alegrar a todo el mundo». Este plan, indicó, se está negociando ahora con los trabajadores y serán ellos los primeros en conocer cómo se desarrollará».

El consejero afirmó que será la consejera la que dé las debidas explicaciones, y aseveró que el acuerdo no pone en riesgo la viabilidad de la empresa pública de la ITV ni existe ninguna intención de subir las tasas. «La ITV es una empresa que es rentable y obtiene sus ingresos a través de las inspecciones técnicas». Peláez negó las acusaciones del PP y afirmó que no ha existido ninguna desautorización de la consejera Roqueñí: «Ha estado siguiendo las negociaciones desde el minuto uno hasta el final y la prueba es que estaba en la mesa en que se firmó el acuerdo».

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