La promotora del edificio siniestrado en Valencia operó en Asturias, pero no construyó

FBEX, con planes de expansión en el Principado antes de quebrar, firmó opciones de compra de pisos en Oviedo que revendió

Imagen de los edificios afectados por el fuego en el barrio valenciano de Campanar.

Imagen de los edificios afectados por el fuego en el barrio valenciano de Campanar. / Jorge Gil - Europa Press

Pablo Castaño

Pablo Castaño

FBEX, la promotora que construyó el edificio incendiado en Valencia, tenía planes para expandir sus promociones por Asturias en los últimos años del "boom" del ladrillo, pero las dificultades financieras que condujeron a su liquidación abortaron esos planes. No obstante, FBEX llegó a tener personal en Asturias y realizó, a través de sus filiales, operaciones de carácter especulativo como la firma de opciones de compra de pisos sobre plano, lo que en el argot del sector se conoce como "dar el pase".

El grupo FBEX, propiedad del empresario catalán Juan Henares, tenía proyectadas en España en 2005, en pleno "boom" inmobiliario, más de 10.000 viviendas. Sus promociones se concentraron en Cataluña, Valencia, Murcia y Baleares. En 2007, Juan Henares señaló en varias entrevistas que pretendía ampliar su campo de negocio a las comunidades de Aragón, Cantabria y Asturias, para después alcanzar la totalidad del territorio nacional. Sin embargo, las dificultades económicas que sufrió la empresa con el estallido de la burbuja inmobiliaria abortaron esos planes y en mayo de 2010 el grupo presentó concurso de acreedores con 640 millones de deuda.

FBEX nunca llegó a construir pisos en Asturias, pero el grupo sí realizó algunas operaciones inmobiliarias en la región, según fuentes del sector. En concreto, filiales de FBEX firmaron opciones de compra sobre plano de cerca de una veintena de viviendas de una promoción en Oviedo de Constructora Principado, empresa asturiana que, al igual que FBEX, ya ha sido liquidada.

Esas operaciones del grupo catalán tenían carácter especulativo. A través de una sociedad inversora firmaban una opción de compra sobre plano, abonaban a la promotora el dinero de la reserva y las mensualidades fijadas hasta la entrega de la vivienda, y cuando llegaba el momento de firmar la escritura varios meses después, vendían dicho derecho a un tercero. Es lo que en el argot del sector se conoce como "dar el pase" y que en la época del "boom inmobiliario" era un negocio muy lucrativo por el continuo incremento de los precios de los pisos. Era una práctica que calentaba aún más el precio de las promociones y que hinchaba la burbuja.

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