Acaban estrellados contra un muro en Siero tras una temeraria huida en un coche robado en Langreo

Los arrestados fueron localizados en Siero, cuando trataban de esconderse, y tras una conducción a gran velocidad y dando volantazos, fueron atrapados en Bendición

Un agente de la Policía Nacional.

Un agente de la Policía Nacional. / Policía Nacional

Luis Ángel Vega

Luis Ángel Vega

Agentes de la Policía Nacional pertenecientes a la Comisaría de Siero detuvieron este sábado a un hombre de 35 años de edad, con numerosas detenciones anteriores, y a dos menores de edad, familiares suyos, que le acompañaban, tras una persecución por varias calles y carreteras de Siero.

Los detenidos, tras varias tentativas de robo de vehículo, consiguieron sustraer un todoterreno en Langreo para a continuación dirigirse a Pola de Siero, donde fueron localizados por una patrulla de la Policía Nacional, cuando intentaban pasar desapercibidos aparcados en un callejón.

Al detectar la presencia policial, emprendieron la huida a gran velocidad, con las luces apagadas.

En ese momento comenzó una persecución por la Nacional 634 a gran velocidad en la que invadieron el carril contrario, poniendo en grave peligro a los vehículos que circulaban en sentido opuesto, sin respetar las señales de tráfico, produciendo daños en la señalización y acometiendo contra el vehículo radiopatrulla perseguidor con la intención de provocar su salida de la vía.

El vehículo policial, manteniendo una distancia prudencial para evitar un accidente y haciendo uso de los dispositivos luminosos y acústicos, apremió al vehículo perseguido en múltiples ocasiones mediante la megafonía del vehículo con indicaciones de “alto policía”, al objeto de conseguir que se detuviese, con resultado negativo, recibiendo como respuesta, nuevas acometidas e intentos de sacar de la carretera al coche de la Policía Nacional.

Finalmente, debido a la velocidad inadecuada a la que circulaba, sufrió una salida de vía en una curva, colisionando contra el muro de cierre de una finca privada en la zona de Bendición (Siero), provocando cuantiosos daños materiales sin que, de forma milagrosa, tener que lamentar víctimas personales.

Los menores quedaron bajo custodia de sus tutores y el hombre pasó a disposición judicial, quedando en libertad con cargos.