Se buscan 60 familias para cubrir la demanda de acogida de niños saharauis en Asturias
La Asociación de Solidaridad con el Sahara quiere llegar a 130 menores el próximo verano con el programa "Vacaciones en Paz"
Niños y miembros de "Vacaciones en Paz", este pasado verano, en una marcha por Gijón. | LNE / Mariola Riera
Si el año pasado eran medio centenar, este son 60 las familias que se buscan de forma urgente para poder acoger a todos los niños saharauis que quieren pasar el próximo verano en Asturias dentro del programa "Vacaciones en Paz". Son 130 en total los menores a los que se aspira a albergar en la región entre julio y agosto.
"Vacaciones en Paz" es un programa solidario de acogida temporal de niños y niñas de 8 a 12 años provenientes de los campamentos de población refugiada saharaui de Tindouf (Argelia). El objetivo es que pasen tranquilos y seguros los meses de julio y agosto. En Asturias, la entidad encargada de coordinar el programa es la Asociación Asturiana de Solidaridad con el Pueblo Saharaui, junto con la Delegación Saharaui en Asturias y el Ministerio de Juventud y Deporte de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD).
No siempre es fácil encontrar a familias que estén dispuestas a acoger a un menor en verano, por lo que siempre es necesario promover campañas informativas y de concienciación. "La búsqueda de familias debe cerrarse meses antes para poder seguir adelante con todos los trámites y gestiones que posibilitan la estancia de los niños en nuestra región. Estamos ya en la cuenta atrás para el verano", explican desde la asociación. "Sabemos que es un paso que despierta muchas dudas". Por este motivo, en el colectivo están dispuestos a explicar y resolver cualquier duda a través de los coordinadores del programa, que cumple 45 años en funcionamiento. Solo se suspendió, debido a la pandemia, en 2020 y 2021.
Tras ese parón de dos años, la asociación retomó poco a poco el programa. En el momento actual el reto es conseguir que 130 niños y niñas saharauis puedan venir en verano a Asturias. El número va poco a poco acercándose a las cifras de acogida de antes de la pandemia.
Con la estancia en Asturias en verano se logra que los pequeños se alejen de las altas temperaturas, reciban una buena alimentación y cuidados de salud y puedan conocer el mundo más allá de los campamentos donde residen todo el año.
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