Continúa el trasvase de médicos de la sanidad pública asturiana a la privada: estas son las especialidades más afectadas

El SIMPA urge que se reduzca el descuento de 1.000 euros que se realiza a los facultativos de la pública que ponen en marcha una consulta particular, "para evitar que se marchen del Sespa"

Una intervención quirúrgica en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA).

Una intervención quirúrgica en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA). / David Cabo

Pablo Álvarez

Pablo Álvarez

Dermatología, psiquiatría, urología, cardiología y neurología son algunas de las especialidades médicas en las que se está registrando un mayor volumen de facultativos de la sanidad pública asturiana que deciden incorporarse a la actividad privada, según las fuentes consultadas por este periódico.

Unos optan por compatibilizar ambos ejercicios, lo que les acarrea una pérdida de unos 1.000 euros mensuales en su nómina del Servicio de Salud del Principado (Sespa) sin que ello les implique trabajar menos horas: es la cuantía del denominado "complemento específico", que recompensa simplemente la dedicación exclusiva al sistema sanitario público.

Otros especialistas apuestan por irse directamente a la privada. Hace una década, eran unos 200 los facultativos asturianos que ejercían únicamente en el sector privado; ahora son cerca de 500.

En un contexto general de escasez de especialistas, el Sindicato Médico Profesional de Asturias (SIMPA) considera "muy preocupante" el éxodo de facultativos de los últimos tiempos "y más aún el que puede darse en el futuro" si el Sespa no ataja esta tendencia. "Hay una competencia brutal por la contratación de médicos y la Administración sanitaria debe tomar medidas urgentes", subraya José Antonio Vidal, secretario general de la organización sindical médica.

El plus de dedicación exclusiva más elevado de España. En consecuencia, el SIMPA urge a la Consejería de Salud a implantar un cambio anunciado por la titular del departamento, Conchita Saavedra, el pasado mes de septiembre, pero que todavía no se ha ejecutado: reducir el importe de ese plus salarial por dedicación exclusiva y pasarlo a retribución fija. El complemento específico de Asturias es el más elevado de las 17 comunidades autónomas del país. El Sindicato Médico propone dejarlo en la cantidad promedio de todas las regiones: unos 200 euros. O sea, que al médico que opte por compaginar pública y privada no se le descuenten 966 euros al mes, sino unos 205.

Retener en la sanidad pública. ¿Qué efecto tendría esta bajada del complemento específico y del descuento, que en su filosofía genérica también respalda el Colegio de Médicos de Asturias? A juicio de José Antonio Vidal, la repercusión sería doble. Por una parte, rebajar ese plus "favorece el deseo del médico de compatibilizar pública y privada", porque al hacerlo pierde menos dinero. Por otra, con esa reducción del complemento salarial el sueldo que le queda en el Sespa es más elevado "y se consigue que trabaje en la privada sin que se marche de la pública, sin descapitalizar el sistema sanitario público".

Dermatología y psiquiatría. Para algunas especialidades, el coste de establecer una consulta privada por cuenta propia no es muy elevado, dado que son disciplinas que no requieren mucha inversión en tecnología. Es el caso de dermatología y psiquiatría, en las que se registra una demanda creciente que desborda la capacidad de respuesta de la red pública. En el caso de la dermatología, esa respuesta es cada vez más pobre debido a la huida de especialistas, que se van a la privada a tiempo completo o parcial, lo que provoca que las listas de espera sean interminables (21.647 consultas pendientes a finales del pasado mes de marzo, con una demora media de 141 días). Entre tanto, en salud mental, muchos pacientes demandan una asistencia más intensiva, no una consulta cada varios meses.

Cardiología, neurología y urología. En otras especialidades, por ejemplo cardiología y neurología, esos médicos necesitan el soporte de numerosas pruebas diagnósticas. Eso les empuja a buscar alianzas con centros privados, que también ven muy apetecibles estas sinergias. La sanidad privada está muy interesada en crecer en este tipo de especialidades, en las que los ingresos por pruebas exploratorias son más suculentos que las propias consultas con los médicos. En urología, disciplina con listas de espera quirúrgicas notables, en los últimos tiempos proliferan empresas que suministran robots para su uso privado. Según algunos expertos, no está nada claro que los procedimientos robóticos sean una panacea en cuanto a resultados quirúrgicos, pero se observa que en muchas ocasiones predomina una cierta "fascinación tecnológica".

Una privada más agresiva. "En el SIMPA no tenemos nada en contra de la sanidad privada, pero ante todo queremos defender la sanidad pública. Y eso requiere que haya médicos suficientes", argumenta José Antonio Vidal, quien alerta de lo que puede suceder si a medio plazo se hace realidad el desembarco en Asturias de una oferta sanitaria privada más agresiva.

Negociación lenta. En una entrevista con LA NUEVA ESPAÑA publicada el pasado 14 de abril, el gerente del Sespa, Aquilino Alonso Miranda, señaló que "hay un compromiso nuestro de revisar a la baja" el plus de dedicación exclusiva pero no de suprimirlo. "Estamos negociando", indicó el gerente del Sespa. Según el SIMPA, "esta negociación va muy lenta y debería cristalizar cuanto antes por el bien del sistema sanitario público". "Tener a los mejores médicos exige reducir o suprimir ese complemento", enfatiza José Antonio Vidal.

La importancia del descuento salarial. Como se ha indicado, la idea que defiende el SIMPA es que si por compatibilizar pública y privada a un médico le descuentan 1.000 euros al mes en la pública, el sueldo de la pública queda muy mermado y la tentación es dejar la pública y dedicarse en exclusiva a la privada. Según el SIMPA, "esto es lo que está sucediendo en los últimos años y está empobreciendo a la sanidad pública". Además, con ese descuento de 1.000 euros, "el médico de la pública que compagina con la privada se ve muy discriminado por cobrar mucho menos que sus compañeros de la pública cuando realmente realiza el mismo trabajo que ellos". En cambio, si la cuantía del descuento es menor, trae más cuenta compaginar ambas sin dejar la pública, indica José Antonio Vidal.

Claves

Tendencia. En Asturias, se está registrando un trasvase de médicos de la sanidad pública a la privada. Dermatología, psiquiatría, urología, cardiología y neurología son algunas de las especialidades con más trasiego. Unos optan por compatibilizar ambos ejercicios, lo que les acarrea una pérdida de unos 1.000 euros mensuales en su nómina del Sespa. Este descuento es el más elevado de las 17 comunidades autónomas del país. Otros especialistas apuestan por irse directamente a la privada. Hace una década, eran unos 200 los facultativos asturianos que ejercían únicamente en el sector privado; ahora son cerca de 500. 

Demanda de los médicos. En un contexto general de escasez de especialistas, el Sindicato Médico Profesional de Asturias (SIMPA) considera «muy preocupante» el éxodo de facultativos de los últimos tiempos «y más aún el que puede darse en el futuro». «Hay una competencia brutal por la contratación de médicos y la Administración sanitaria debe tomar medidas urgentes», subraya José Antonio Vidal, secretario general de la organización médica. El SIMPA propone reducir de 1.000 a 200 euros el descuento que se realiza a los médicos que se incorporan a la privada, con el objetivo de evitar que abandonen la red pública.