Entrevista | Manuel Pinedax Diputado por IU en el Parlamento Europeo

"El lobo se está utilizando en política de un modo partidista y oportunista"

"Una confluencia de partidos políticos tiene que trabajar unida, por separado somos débiles"

Manuel Pineda.

Manuel Pineda. / David Cabo

El soldador ferroviario almeriense y sindicalista de Comsiones Obreras (CC OO) Manuel Pineda (Almería, 1965) es eurodiputado y candidato de nuevo por Izquierda Unida (IU) en el cuarto puesto de las listas a Europa de Sumar. Pineda vivió durante tres años en Gaza, desde 2011 hasta 2014, tras lo cual asumió la responsabilidad sobre temas de Oriente Medio en el partido y de ahí dio el salto a la política europea.

–¿Qué relación espera IU y Sumar tras la tregua de la coalición para estas elecciones europeas?

–Sumar es un espacio en construcción, así que no tengo una respuesta concreta para esto. Creo que nadie la tiene. Nosotros, IU en sí, somos una confluencia de partidos políticos. Por separado somos muy débiles todos, necesitamos unidad. Y esa unidad debe ser desde el respeto a la pluralidad y la diversidad. Desde que se le dio nombre a Sumar no hemos tenido un momento para sentarnos y ver "qué queremos ser de mayores", vamos de un modo un poco improvisado, todavía hay que hacer el encaje de las distintas familias. El nombre es irrelevante, lo importante es trabajar juntos, se le puede llamar Sumar, Unidas Podemos, como lo hacía hasta hace unos meses, o "los que llegaron tarde" (ríe).

–¿Y qué peso tiene IU Asturias dentro de la organización federal de la coalición?

–Es una de las más potentes, con más arraigo y presencia territorial y con más apoyos. Todas nuestras organizaciones son importantes, pero no todas tienen el mismo peso o apoyo popular. En Asturias la izquierda transformadora que representa IU y antes el Partido Comunista, siempre ha tenido mucho peso. Estamos hablando de una comunidad en la que sectores como el minero son clase obrera pura y dura, de dar batallas tremendas. A cualquier sitio que tú vayas aquí que se mueva algo está Izquierda Unida y eso se consigue a base de llevar a cabo un trabajo ejemplar generación tras generación. Asturias tiene mucho peso en nuestra organización y debe tener peso también en la nueva dirección.

–Si la Comisión Europea decide revisar la especial protección del lobo, ¿no habría que replantear la política de España que ha dejado en inseguridad jurídica los controles que mantenían autonomías como Asturias?

–Yo creo que a veces creamos o sobredimensionamos problemas donde no los hay. Reconozco que no es un tema que conozca en profundidad, pero tengo la sensación de que el tema del lobo se está utilizando de un modo partidista y oportunista. Es verdad que a un ganadero que se levanta por la mañana y el lobo le ha matado sus ovejas o vacas le genera un problema, y lo que tenemos que hacer es que ese ganadero no se quede desamparado a través de las ayudas que sean necesarias. Pero yo en cualquier caso no creo que la solución pase por levantar cualquier tipo de protección sobre una especie que tiene que estar protegida, siempre que sea necesario según el número de ejemplares. Lo mismo pasa con los problemas agrarios o la contaminación.

–¿De que sirve reducir emisiones de dióxido de carbono en Europa mientras se fomenta la compra e industria de Marruecos que contamina mucho más?

–Es lo que pasa cuando se ponen los intereses económicos por encima de los humanos y medioambientales. Los acuerdos internacionales que hay para combatir el cambio climático llegan al punto de permitir comprar derechos de emisión de gases. Son atajos para no enfrentar que el planeta se muere.

Suscríbete para seguir leyendo