Campañones, Illán GARCÍA

Los vecinos de Campañones exigieron ayer que se solucionen de manera urgente los malos olores que genera el vertedero de Cogersa, que afectan a la calidad de vida en la localidad. Este problema no es nuevo, sino que es una de las reivindicaciones más antiguas de la asociación Amigos de Campañones, que preside Alfredo García. El olor, según los vecinos, se intensifica o afloja en función de dónde sople el viento, pero aún así en varios lugares de esta localidad rural el hedor es siempre más que desagradable.

«Queremos saber qué medidas se pueden tomar para no tener que sufrir estos olores ni un día más», dijo el dirigente vecinal. Este problema es harto conocido por las autoridades municipales, no en vano el colectivo vecinal no ha cejado estos años en su empeño de conseguir una vida más saludable. «Puede pensarse que estamos acostumbrados, pero eso no es excusa para poner remedio a esta peste», dijo una vecina que vive en la zona más próxima al vertedero, que añadió: «Parece que hoy -por ayer- no huele mucho, pero cuando tira el viento para acá se vuelve insufrible».

Años atrás se planteó la posibilidad de instalar una incineradora, pero esa propuesta, en principio, se rechazó, según los ecologistas, por los altos índices contaminantes que desprende. Ahora los vecinos incómodos piden al Principado que les dé una solución. Este asunto es una de las constantes en las reuniones vecinales en las que se expresa el malestar de una comunidad dedicada, principalmente, a la ganadería y a la agricultura.

Al margen de asuntos polémicos y desagradables, los vecinos de Campañones anuncian la organización de nuevos actos sociales de hermandad. La próxima cita será el 26 de abril, día en el que Amigos de Campañones rendirá un cálido homenaje a dos vecinos que han superado los 80 años: Florentina Muñiz y José Heras. Para la ocasión, como es tradición en la parroquia, se celebrará una multitudinaria comida en el local social.