Los niños de Avilés quieren ir al cole en bicicleta, dar su opinión antes de que el hormigón gane nuevos espacios en la ciudad, que los billetes de autobús sean más económicos para los menores de edad y, muy importante, que los bancos de los parques mejor que individuales sean para grupos. Defienden también la convocatoria de campañas de limpieza urbana y la celebración de ferias de alimentación saludable además de otras iniciativas relacionadas con las nuevas tecnologías como la implantación de una escuela de "youtuberos". Aunque sus pretensiones son altas, los niños y adolescentes avilesinos sostienen que la primera victoria es suya: "Nos han dado la oportunidad de hablar y de aportar ideas, y lo hemos hecho", explicó Mamen Álvarez, alumna del colegio de San Nicolás.
Álvarez es una de las jóvenes que participó ayer en el auditorio del Centro Niemeyer en la presentación del II Plan de Infancia y Adolescencia de Avilés, un documento con vigencia hasta 2016 con el que los jóvenes de la ciudad han puesto ahora el broche de oro a un año y medio de intenso trabajo. El Plan recoge 31 medidas a realizar relacionadas con el urbanismo, el medio ambiente, la educación, la salud, la cultura y el ocio. "Sabemos que algunas de nuestras propuestas no saldrán adelante pero otras son factibles", sentenció Miguel García, del colegio de Llaranes.
"La escuela de 'youtuberos' , para enseñar a otros niños a subir vídeos a YouTube, es probable que quede en nada. Pero otras iniciativas que planteamos como fomentar el consumo de fruta, organizar actividades deportivas por la ciudad, impulsar un blog escolar para que los padres puedan revisar los deberes que nos ponen los profesores o publicar un periódico escolar sí pueden salir", dijo el niño. Omar Vázquez, del Menéndez Pidal, defendió a su vez la existencia de espacios con wi-fi gratuito en los colegios. Claudia Fernández, del San Nicolás, presentó otra propuesta que pasa por ir al colegio en bicicleta "al menos un día al año".
Vera Jiménez y Alexandra Velasco, ambas del Menéndez Pidal, justificaron a su vez la necesidad de "arreglar el medio ambiente" y presentaron las conclusiones de sendos viajes a Bruselas y Guadalajara en los que participaron como integrantes del Consejo de infancia y adolescencia de Avilés. Carla Allende y Lucía Ruiz, del Carreño Miranda, también hicieron alusión al viaje al corazón de la Unión Europea, donde participaron en una convención contra la pobreza. La pequeña Amelia Martínez, del Enrique Alonso, se mostró por su parte encantada de poder hacer oír su voz en Avilés: "Tenemos mucho que decir", concluyó la niña. Cerca de setecientos menores se mostraron ayer satisfechos de su trabajo en beneficio de la ciudad.
