La pasada Nochevieja volvieron a saltar chispas en la relación profesional que mantienen los taxistas de Avilés y los de Corvera; algunos de los primeros critican a los segundos por intrusismo y por cargar viajeros en el término municipal avilesino "saltándose olímpicamente" el pacto verbal al que llegaron hace unos meses para tratar, precisamente, de aliviar las tensiones derivadas de trabajar en concejos limítrofes. Aunque las quejas vertidas a título particular por algunos taxistas avilesinos no cuentan con el respaldo oficial de la principal cooperativa del municipio (Villa del Adelantado), el presidente de la misma, Francisco Bayona, admite que el clima está "un poco enrarecido" por el comportamiento de una minoría de taxistas y anuncia la próxima convocatoria de una reunión entre profesionales del taxi de ambos municipios para tratar de llegar a un acuerdo formal de colaboración que ponga negro sobre blanco las premisas de buena vecindad fijadas en un encuentro precedente.
Con este "pacto de caballeros" se quiere dejar abierta la puerta a que los taxistas de Corvera carguen clientes en Avilés o viceversa, pero dentro de un orden: no podrán hacerlo en la paradas, ni siquiera en un radio donde éstas estén a la vista, y tampoco en los hoteles, salvo contadas excepciones como los clientes de empresa apalabrados de antemano. Un acuerdo muy similar a este fue suscrito hace años entre los taxistas de Avilés y los de Castrillón y hasta la fecha no hubo mayores quejas de funcionamiento. El sentido de esta colaboración es obvio en una comarca tan pequeña como la avilesina y que en realidad es un continuo urbano: al usuario le resulta más cómodo y barato en ciertas ocasiones llamar a un taxi de otro concejo que a uno del municipio en el que se halla.
Las quejas de cierto sector crítico con la dirección de la cooperativa "Villa del Adelantado" tienen que ver con prácticas "desleales" de profesionales de Corvera que, según relató ayer a este diario un taxista avilesino, "rozaron el descaro en Nochevieja, llegando a coger gente en las paradas avilesinas sin ningún rubor". Con anterioridad hubo otros episodios que no gustaron nada al colectivo avilesino del taxi, como la distribución de publicidad de una cooperativa corverana de taxis en barrios de Avilés próximos a ese concejo o la atención indiscriminada a llamadas realizadas desde Avilés. Desde Corvera, uno de los miembros de la cooperativa aludida niega la mayor y achaca los "nervios" de algunos colegas avilesinos a la caída generalizada del negocio por la crisis: a menos carreras, menos recaudación y más tensión.
Los concejales responsables del sector del taxi en Avilés y Corvera, Luis Ramón Fernández Huerga y Rafael Alonso, quitan hierro a las posibles fricciones y confían en que los responsables de las cooperativas de ambos concejos sean capaces de sentar pronto las bases de una leal colaboración.
