"El patrimonio industrial de Avilés se encuentra prácticamente sin explotar y completamente desaprovechado en su vertiente turística, educativa y patrimonial", critican los integrantes del Club Popular de Cultura Llaranes. Ayer se sumó a sus lamentos el historiador avilesino Julio García-Maribona: "El pasado industrial de Avilés ha sido borrado, no se ha mirado para él. Hubo la posibilidad de conservar ciertos edificios que podrían haber sido un referente y no fue así". Agregó en este sentido: "El problema es que en Avilés hay mucha industria y este es un patrimonio difícil de mantener y de conservar el interés por él".
García-Maribona realizó estas declaraciones poco antes de presentar en Llaranes una investigación sobre el martinete del Castañedo de Zaldúa, una industria dedicada al cobre que existió hasta finales del siglo XIX en terrenos que hoy vienen a coincidir con la calle Martinete y el colegio público Apolinar García Hevia. "Esta industria desconocida incluso para los que viven en la calle Martinete de Llaranes dio trabajo al 22 por ciento de los avilesinos", ahondó. Del martinete de Zaldúa queda el edificio fabril y poco más. El complejo industrial se componía de dicho edificio, un gran arco de entrada, una casona y una capilla de la que se conserva el escudo, colocado ahora sobre la fuente anexa al Ayuntamiento de Avilés, en la calle de La Fruta.
Con esta conferencia organizada por el Club Popular de Cultura, los vecinos de Llaranes inician una campaña que tiene por objeto poner en valor el martinete del Castañedo de Zaldúa.
