El concejal de Medio Ambiente de Castrillón, José Luis Garrido, aseguró ayer que en las zonas verdes y jardines del concejo no se utiliza el Babosil, un cebo granulado para el control de caracoles y babosas, que podría ser el veneno que presuntamente acabó con la vida de un perro el pasado domingo en Raíces Nuevo. "Además, el informe veterinario no es concluyente sobre las causas de la muerte del perro pues sería necesario practicarle una necropsia", señaló.

"El informe fue redactado por los agentes de la Policía Local que acudieron el domingo a Raíces Nuevo", dijo. Asociaciones ciudadanas y vecinos de la localidad están investigando el asunto y piden la colaboración de todas aquellas personas que puedan saber algo. Es importante que los ciudadanos, si ven un cebo sospechoso o si un perro o un gato pudiera haber sido envenenado, avisen al 062 para que la Guardia Civil y Seprona puedan actuar. También es relevante, en caso de duda sobre el estado del animal, llevarlo lo antes posible al veterinario.