La decisión de habilitar en La Canal las nuevas aulas de la escuelina infantil ha tenido una gran acogida por todas las partes implicadas. El anuncio por parte del Ayuntamiento de que el destino elegido era el colegio ponía el punto final a un conflicto que había despertado preocupación en Luanco y que comenzó con la publicación de las listas de admitidos, que dejaban a más de 30 niños fuera del centro para bebés.

"Estamos muy contentas, la noticia es muy buena", señalan ayer las familias afectadas, que ya habían iniciado una recogida de firmas en Gozón para reforzar sus peticiones. Esas firmas pedían la apertura en septiembre de las nuevas aulas y para todos los niños. "Se abrirá en enero, pero estamos muy contentos porque se acogerá a todos los niños", decían.

Siempre es difícil contentar a todo el mundo y alguna crítica se podía escuchar respecto a los plazos: "Vamos a tener antes el parque de Peroño que la escuela". Pese a todo, la satisfacción predomina entre las familias.

La misma que en el colegio que acogerá a los pequeños en enero. Marta Prendes, directora del colegio La Canal, asegura que en el centro están "encantados todos: profesores, personal administrativo, en la cocina...". Y eso que asumen que "durante una temporada va a ser un engorro por las obras y estaremos un poco liados, porque hay que modificar muchas cosas en los próximos meses".

Las obras empezarán ya para trasladar la zona de despachos, donde se asentarán las aulas. "Hay que llevar a otro sitio el despacho de dirección, el de la jefatura de estudios y la sala de profesores", explica Prendes. También están contentos en La Vallina, donde "como docentes, pero sobre todo como vecinos, queríamos una solución rápida", señala Fran Roso, su director. El centro recibió críticas del Ayuntamiento ante una supuesta oposición a acoger las aulas, pero Roso aclara que "no había oposición como claustro a la instalación". "Incluso dentro del profesorado hay madres afectadas por el problema", dice. En el centro, "valorábamos un uso temporal de la casa del conserje para 0 a 3 y la posterior devolución a La Vallina". La relación con el Ayuntamiento "es muy buena y siempre queremos ser útiles".