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La iglesia de La Maruca será derribada para hacer un parking tras su venta

El Arzobispado de Oviedo acepta la oferta de una empresa de supermercados que pretende ampliar una de sus superficies

La operación inmobiliaria, finalmente, saldrá adelante. Tal y como adelantó LA NUEVA ESPAÑA, el Arzobispado de Oviedo acordó ayer aceptar la oferta de compra que había lanzado una empresa de supermercados para la iglesia de San José Obrero, la de La Maruca, actualmente, en estado de semiabandono. Y es que apenas se celebra una misa a la semana. El templo, en todo caso, lo dirige espiritualmente Francisco Javier Panizo, el sacerdote que está al frente, a su vez, la unidad pastoral que forman también Miranda, San Cristóbal, Raíces y, desde ayer mismo, La Carriona. El veterano sacerdote Juan Heriberto Fernández Suárez también ofrece alguna misa en La Maruca.

Se da la circunstancia de que el Ayuntamiento de Avilés había rechazado a comienzos de este pasado mes de agosto conceder una licencia de obras que había planteado la multinacional alemana Lidl. La idea de esta empresa era ampliar la segunda de las tiendas que tiene en Avilés. Esto sí que pudo llevarlo a cabo en su otro local, el de la avenida de Gutiérrez Herrero. El rechazo de la solicitud estuvo vinculado a que el proyecto inicial tocaba la carretera nacional, es decir, un vial que no administra el Consistorio.

Según ha sabido este periódico, la venta del templo de San José Obrero se hace para proceder a su derribo y construir en su solar un aparcamiento en superficie para atender las demandas de los clientes. De esta manera, la ampliación de la tienda de Lidl de La Maruca podría realizarse con el beneplácito de la Demarcación de Carreteras, que es, a fin de cuentas, la administración encargada de la zona.

La parroquia de San José Obrero fue desmembrada de Santo Tomás de Cantorbery, de Nuestra Señora del Carmen de Salinas y de San Cristóbal de Entrevías. O sea, partió de ellas. La erigieron por decreto del Arzobispo de Oviedo Vicente Enrique y Tarancón. Lo había firmado el 1 de julio de 1968, según recoge el párroco emérito Ángel Garralda en su libro "Avilés, su fe y sus obras".

La primera piedra de la iglesia que se derribará próximamente se colocó en unos terrenos cedidos por la familia Pola aquel mismo año. El primer párroco que se ocupó de los vecinos de La Maruca, El Reblinco y de Raíces Nuevo fue José Antonio García Fernández. Las obras de la iglesia se retomaron siete años después. La atención espiritual de aquellos vecinos, mientras tanto, se realizó en unos bajos comerciales cercanos.

La creación de la parroquia es fruto del devenir histórico y demográfico vivido en Avilés en los años del Desarrollismo. Las parroquias históricamente más antiguas del concejo son las de San Nicolás de Bari, Santo Tomás Cantorbery, Santo Domingo de Miranda y San Cristóbal de Entreviñas. De todas ellas surgieron las actuales, en un afán de llegar hasta el último de los católicos llegados a Avilés al olor de la gran siderúrgica.

El templo lo terminó levantando Manuel Calvete Llamas. Se inauguró el 1 de mayo de 1976 y contó con la bendición de Gabino Díaz Merchán, que había sustituido a Tarancón. Entonces el párroco fue Juan Heriberto Fernández Suárez. Ya en los años noventa, y ante el crecimiento de Raíces Nuevo, la parroquia de San José Obrero necesitó otro templo. Se construyó en Raíces en 1996.

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