Una colonia de estorninos obliga desde hace días a tener que baldear varios puntos de Luanco a diario. Este cometido lo están desarrollando operarios de la empresa privada Urbaser, quienes están contratados por el Ayuntamiento gozoniego para el servicio de limpieza viaria. El encargado de Obras, Raúl Gutiérrez, conocedor de esta realidad, comentó que se trata de "un problema grave" que se pretende atajar cuanto antes.
Gutiérrez concretó que el asunto está en manos de la oficina técnica municipal, donde "están buscando soluciones al problema". Mientras tanto, la colonia de estas aves migratorias está dejando huella en muchos puntos del centro de Luanco.
Un ejemplo: los bancos del parque Zapardel tienen que ser limpiados asiduamente porque amanecen con multitud de excrementos de estorninos. Más de lo mismo ocurre con el suelo de este espacio. Y es que parece que las aves han optado por asentar su colonia en el centro de Luanco. La suciedad que generan es un problema importante que supone un gasto extra en agua por el aumento de la frecuencia del baldeo de las calles, que se está ejecutando con máquinas hidrolimpiadoras que echan agua a presión. Pero no es el único. El canto de los estorninos puede llegar a causar molestias a los vecinos como ocurrió en otras zonas de Asturias donde también tuvieron que tomar medidas al respecto.
Los estorninos, conocidos por su nombre científico como "Sturnus vulgaris", son aves migratorias que suelen aparecer en los núcleos urbanos en invierno. La razón de este fenómeno no es otra que la búsqueda de alimentos para asegurar la supervivencia de la especie. Y es que en la temporada estival, este tipo de aves están más pendientes del cuidado de sus crías. Para lograr su cometido buscan zonas arboladas, como puede ser el parque Zapardel. Ahora quizá aminore su presencia, ya que la semana pasada podaron los árboles de este espacio.
