El Principado contrata una consultora para la venta de Alcoa

El Principado ha contratado una consultora externa como refuerzo en la búsqueda de inversores para la planta de Alcoa en Avilés, una asistencia técnica para la oficina de proyectos industriales que anunció hace unas semanas el consejero de Industria, Isaac Pola. El plan pasa por conseguir uno o varios inversores industriales (con preferencia sobre un fondo capitalista) que mantenga la actividad en las instalaciones de San Balandrán (tanto las series de electrolisis, donde se fabrica el aluminio puro como la fundición) e incorporar un proyecto alternativo para incorporar producto acabado y con valor añadido. Pola manifestó recientemente en que a la próxima reunión que se celebrará en Madrid el próximo marzo se presentarán avances en este sentido.

Precisamente eso es lo que demanda el comité de empresa de Avilés. "Tiene que haber un marco energético estable y un proyecto industrial integral que mantenga la electrolisis, la fundición y que añada productos terminados. Con eso aparecerán inversores de verdad y no moscones que quieran comprar parte de la empresa para hacer negocio. Tal como está la fábrica ahora es difícil competir con Emiratos, Canadá o Noruega. Tenemos que especializarnos y hacer un producto de calidad y de alto valor añadido", apuntó esta misma semana el presidente del comité, José Manuel Gómez de la Uz.

Las cubas que conforman las series de electrolisis (donde se fabrica el aluminio puro con un proceso muy intensivo en consumo eléctrico) ya están muertas (el apagado programado concluyó en la medianoche del miércoles) y ya solo permanece activa la fundición. Es la única parte de la fábrica que sigue funcionando y que Alcoa pretende mantener más allá del 30 de junio, cuando expira el plazo para la venta del complejo aluminero.

Los representantes de los trabajadores se reunirán la próxima semana con la dirección de la fábrica para analizar, entre otras cuestiones, cómo se aplicará el plan de formación acordado para ocupar a la plantilla de electrolisis. Estos trabajadores continuarán de alta en la Seguridad Social y seguirán percibiendo su retribución de la jornada ordinaria.