Uno de los elementos clave del juicio del caso del agua es un "post-it" que los agentes de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) descubrieron en un expediente del Ayuntamiento de Corvera. Su autoría es la que discutieron ayer en Oviedo cuatro peritos calígrafos: el de la Policía Nacional, los dos del exjefe territorial de la empresa gestora de las piscinas y el del exalcalde corverano, Luis Belarmino Moro. Ninguno de ellos llegó a la misma conclusión, de tal manera que la magistrada encargada de desentrañar el caso del agua les preguntó directamente si la grafología es o no es "una ciencia exacta". En este punto tampoco se pusieron de acuerdo.

En el "post-it" sometido a escrutinio está anotada una cifra que coincide con la suma total de las facturas que supuestamente habría girado el pintor Maximino Sánchez a cuenta de unos trabajos que el artista negó en su momento haber realizado y que se convirtieron en la mecha que hizo prender el caso del agua, el que se está juzgando desde finales de octubre en Oviedo, que busca determinar si se extendieron ciertamente facturas falsas a cuenta de la construcción de la cafetería de la piscina de Las Vegas y si el antiguo gobierno corverano concedió fuera de la legalidad el contrato de redacción de los pliegos de condiciones para hacer la obra.

"Aquagest. 134.897 IVA. 190 sin IVA, obra no realizada": esto es lo que pone en el "post-it" de marras. Se da la circunstancia de que la defensa de Moro puso en duda que el exalcalde lo escribiera porque los policías lo descubrieron en un expediente que habían examinado dos veces en unos pocos meses. Es decir, que lo vieron una vez y no dijeron nada de él, aunque sí lo señalaron la segunda vez. Además, apuntó el abogado del exalcalde, la suma corresponde "a cuatro facturas": dos por obras en Luanco y no en Corvera y una de ellas, después de que Moro hubiera salido del gobierno. Esto último lo ilustró Moro especificando que él no tenía "el don de la adivinación".

En este punto, el perito de la defensa del exalcalde expresó: "Don Belarmino [Moro] no es el autor del anónimo. La calidad caligráfica del 'post-it' es muy superior a la de la muestra indubitada (la que Moro escribió ante el juez)". La letra del exalcalde es "poco evolucionada", en opinión del experto contratado por su letrado. "Las coincidencias son mayores con la letra de Luis Solares que con Moro", añadió. "Pero esto no quiere decir que Solares haya sido el autor. No se me ha pedido localizar al autor", aclaró.

El perito de la Policía Nacional defendió su trabajo ante los ataques lanzados por las defensas tanto de Moro como del exjefe territorial de la empresa de las piscinas. Uno de los peritos de este último acusado incurrió en una aparente incoherencia: al principio de la declaración señaló que no era lo mismo escribir en un "post-it" que en un folio -"es de cajón de madera", apuntó-. Sin embargo, al término de la exposición, dijo que sí, que daba lo mismo escribir en uno u otro formato. La vista continúa la semana que viene, con los expertos informáticos.