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El Ayuntamiento se asegura que no tendrá que descontaminar la parcela del gasómetro

Avilés se quedará con el depósito, su ascensor y la escalera de servicio mientras que las demás instalaciones auxiliares se desmantelarán

El gasómetro que se va a indultar. María Fuentes

La propietaria de las baterías de coque de Avilés, la sociedad estatal Sepides, cederá al Ayuntamiento el gasómetro número dos de la coquería, el ascensor y la escalera mientras que el resto de instalaciones auxiliares también se desmantelarán, según el documento que se está perfilando y que el gobierno local y Sepides confían cerrar a comienzos de la próxima semana. El Ayuntamiento se ha asegurado, además, que no tendrá que descontaminar la parcela del gasómetro indultado, puesto que dispone de documentación que concluye que su futuro uso "no representa riesgo inadmisible para la salud".

Este asunto de la descontaminación no es baladí, dado el coste económico que conllevaría el proceso y lo que podría dilatar la reutilización de la colosal estructura que se indultará.

Son muchos los números que se llevan echados en el último año en torno al gasómetro y su conservación y las cifras han ido bailando con el paso de los meses. El gobierno local cifró el pasado marzo en unos 100.000 euros anuales el coste anual del mantenimiento del depósito, pero las fuentes consultadas sostienen ahora que la cifra será mucho menor a lo que se preveía inicialmente. La limpieza interior del gasómetro costará unos 160.000 euros más IVA al Ayuntamiento, que además del mantenimiento anual de la estructura tendrá que pintarla cada diez años para garantizar la conservación (la próxima mano tocaría darla en 2028).

El convenio urbanístico en ciernes contempla también las competencias de la futura entidad de conservación, que estará formada por todos los propietarios de las parcelas que conforman el Plan de Baterías, al estilo de la del Parque Empresarial Principado de Asturias (PEPA) y que será la encargada del mantenimiento de infraestructuras y servicios así como de las zonas verdes y de uso común del futuro ecoparque. Está previsto que las piezas del rompecabezas acaben de encajar, al fin, en cuestión de días.

Fondos europeos

El conocido como Plan de Baterías, que supone el desmantelamiento de la antigua coquería de Ensidesa y la puesta en marcha de un ecoparque, optará a fondos europeos Feder o de Transición Justa. Como informó este periódico, Sepides tiene entre sus objetivos conseguir financiación externa.

La sociedad contrató a E&Y el análisis de ayudas europeas de todos los proyectos de su área inmobiliaria y esta multinacional ha concluido que el proyecto avilesino podría tener cabida en dichos fondos. Ahora está a la espera de la apertura de convocatorias y requisitos para conseguirlos.

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