Un suceso que conmocionó a la región

El drama de la familia de la avenida de Los Telares: el abuelo en prisión, a la madre le quitan la custodia de la niña y se la dan al padre, en libertad

La Fiscalía acusa a D. G.-B., de 65 años, de intento de homicidio y de romper la prohibición de acercarse a su exyerno, al que fue a buscar con un cuchillo y un martillo

Los vehículos policiales a su llegada a los juzgados con los detenidos.

Los vehículos policiales a su llegada a los juzgados con los detenidos. / MARIA FUENTES

Marián Martínez

Marián Martínez

El juez envió este Jueves Santo a prisión al padre de la mujer de 46 años que se lanzó con su pequeña, de 7, desde un quinto piso en la avenida de Los Telares y a ella le ha retirado la custodia, en favor del padre de la pequeña. Al hombre, trasladado al centro penitenciario de Asturias, tras declarar en los Juzgados de Avilés junto a su exyerno, se le atribuye un delito de quebrantamiento de una orden de alejamiento y otro de homicidio en grado de tentativa contra el padre de la niña, al que hizo la espera armado con un cuchillo, un martillo y un bote de spray de pimienta. Ambos se enzarzaron en una pelea en la que acabaron lesionados. Respecto a la madre, contra la que ya se ha abierto un procedimiento, se le ha retirado la custodia de la niña, que le ha sido otorgada al progenitor. La abogada de este, Sofía Duart, explicó que, además, el magistrado ha dictado una orden de alejamiento para la madre de la menor respecto de la pequeña y le ha prohibido verla, al no tener reconocido un régimen de visitas. El padre de la menor quedó en libertad con cargos por las lesiones que le causó a su exsuegro.

El abuelo materno, que responde a las iniciales D. G.-B. G. y de 65 años, compareció con varias heridas y puntos de sutura, además de un brazo en cabestrillo. Según su abogada, María Luisa Nevado, estaba en shock, pero admitió los hechos ante el juez y fue trasladado directamente al centro penitenciario.

María Luisa Nevado, abogada del abuelo de la niña. | María Fuentes

María Luisa Nevado, abogada del abuelo de la niña. | María Fuentes / Marián MartínezM. Martínez

Eran las 10.13 horas cuando dos vehículos de la Policía Nacional enfilaban la calle Marcos del Torniello procedentes de la Comisaría de Policía Nacional para acceder al aparcamiento interior de los Juzgados. El primero trasladaba al padre de S. G-B. A. y abuelo de la niña, ambas ingresadas en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA). En el segundo iba el padre de la pequeña, de 44 años. Los dos habían sido detenidos a las seis de la mañana del día anterior. La expectación era máxima en la calle, delante del Palacio de Justicia avilesino, donde se concentraron un grupo de familiares del padre de S. G.-B. A., además de los curiosos que se paraban al ver el nutrido grupo de periodistas que esperaban en la acera desde primera hora. La complejidad del caso hacía prever que la espera sería de horas.

Edificio desde el que la madre se arrojó con su hija en brazos desde el quinto piso, en la avenida de Los Telares. | M. F.

Edificio desde el que la madre se arrojó con su hija en brazos desde el quinto piso, en la avenida de Los Telares. | M. F. / Marián MartínezM. Martínez

La tranquila Semana Santa avilesina, declarada de Interés Turístico, saltaba por los aires en la mañana del miércoles. Eran aproximadamente las diez de la mañana cuando una mujer se tiraba por la ventana de su vivienda, un quinto piso, con su hija pequeña en brazos.

Según el relato de algunos testigos, la niña gritaba "no, mamá, no". Tras esas voces, vieron cómo la mujer se subía a una escalera y se lanzaba con la pequeña. Cayeron sobre un coche y de ahí a la acera, justo delante de su portal, el número 38 de la avenida de Los Telares. "Oí un estruendo y ya vi los dos cuerpos en el suelo", relató otro testigo.

El Servicio de Asistencia Médica de Emergencias (SAMU) recibió el aviso a las 10.14 horas, y a las 10.22 llegaron al lugar los equipos sanitarios en una UVI móvil y otra ambulancia convencional, según confirmaron desde la Consejería de Salud.

La mujer, S G-B. A., fue intubada y trasladada al HUCA) en la UVI móvil de Avilés. A la pequeña, que permanecía consciente, se la consiguió estabilizar en el mismo lugar y posteriormente fue trasladada también al HUCA en otra UVI móvil que llegó desde Oviedo. Ambas permanecen ingresadas y aunque su estado es grave y permanecen en la UCI, están fuera de peligro.

La madre de S. G-B. A. y abuela materna de la niña, que reside en el segundo piso del mismo edificio, se intentó cortar las venas en la bañera al sufrir un ataque de ansiedad por lo sucedido. Las lesiones fueron de carácter leve y la atendió un equipo de Atención Primaria.

La abogada del abuelo de la niña, con familiares. | María Fuentes

La abogada del abuelo de la niña, con familiares. | María Fuentes / Marián MartínezM. Martínez

Mientras ocurría todo esto, trascendía que solo unas horas antes, a las seis de la mañana, habían sido detenidos un varón de 65 años y otro de 45 por una reyerta en la avenida San Agustín. Fue difícil conectar ambos sucesos, pero finalmente se supo que se trataba del abuelo materno y el padre de la niña.

Al parecer los desencuentros y disputas venían de tres años atrás, cuando la pareja se separó. Desde entonces se sucedieron los amenazas, denuncias y procedimientos judiciales. Lo más reciente era el archivo de una causa pendiente a favor del padre de la pequeña, L. I. L., al que se le otorgaba un régimen de visitas "normalizado", fuera del punto de encuentro. Eso suponía que la niña tenía que irse el miércoles con su padre a pasar unos días durante estas vacaciones escolares.

El abuelo de la menor ya había intentando agredir a su exyerno anteriormente, y de ahí que hubiera una orden de alejamiento vigente. Orden que se saltó hace unas dos semanas y que se volvió a saltar nuevamente este mismo miércoles. El hombre, armado con un cuchillo de cocina de 13 centímetros, un martillo y un spray de pimienta, le hizo la espera en la calle. El padre de la niña llegó de trabajar y allí se lo encontró. La Policía Local halló también en el lugar un bate de béisbol.

María Luisa Nevado Carbajo, letrada del turno de oficio que asistió ayer al abuelo de la niña, señaló que el hombre "explicó que él y toda su familia han estado sometidos a mucha tensión por el proceso de custodia y régimen de visitas de la menor". Confirmó que "los hechos coinciden con que el padre había recuperado las visitas fuera del punto de encuentro".

La abogada añadió que el abuelo de la pequeña admitió que acudió en busca de su exyerno, "pero luego no fue capaz de hacer nada". Por contra, "recibió una paliza por parte del padre de la menor", señaló. También indicó que "esta persona –por su representado– se ha ido enterando de la situación a trompicones, está en shock y no estoy segura de que tenga plena conciencia de lo que está ocurriendo".

Ingreso en prisión

La Fiscalía solicitó el ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza del abuelo de la pequeña, como presunto autor de un delito de homicidio en grado de tentativa y de otro de quebrantamiento de la orden de alejamiento, que sería el segundo. Además, el Ministerio Fiscal entendía que existía riesgo de que el hombre atentara nuevamente contra la víctima.

Para el padre de la niña, la Fiscalía solicitó la libertad provisional. Pero teniendo en cuenta los antecedentes y la documentación aportada, pidió además que se privara de la patria potestad a la madre de la menor, que se atribuyera al padre su tutela, que se prive a la mujer del régimen de visitas y que se dictara una orden de alejamiento para los abuelos maternos con respecto de la pequeña.

El magistrado titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 5 de Avilés, en funciones de guardia, dictó un auto de prisión provisional comunicada y sin fianza para el abuelo, atendiendo los argumentos y la solicitud de la Fiscalía, sin perjuicio de que dicha calificación pudiese modificarse en la instrucción. También dictó el traslado "de inmediato" a prisión.

El padre de la niña quedó en libertad, aunque seguirá unido a la causa, en su caso por lesiones. La abogada del progenitor de la pequeña, Sofía Duart Álvarez de Cienfuegos, limitó sus declaraciones a la salida del Juzgado a indicar que "el abuelo ha sido ingresado en prisión provisional", y añadió que también "se le ha dado la guardia y custodia y la patria potestad exclusiva al padre, y la madre tiene una orden de alejamiento respecto de la niña y no tiene reconocido el régimen de visitas".

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¿Qué puede llevar a una madre al suicidio y arrastrar a su hija con ella? Vecinos y amigos de la mujer que se tiró con su hija en brazos desde un quinto piso en el número 38 de la avenida de Los Telares aseguran que «estaba desesperada», «obsesionada», con el régimen de visitas del padre de su hija. «No quería que viera a la niña, que la cría estuviera con él», aseguran. Pero nadie se podía creer que llegara al límite de intentar matarse con la niña en brazos. 

Los expertos aseguran que cuando una madre llega al extremo de matar a sus hijos y suicidarse, lo hace movida por un «amor delirante», y que el objetivo último es liberarles de una realidad emocional que es la suya, y que no tiene que coincidir con la real, pero en la que ella no contempla, no ve, otra posible salida.

El doctor Juan José Martínez Jambrina, psiquiatra y director del área clínica de Salud Mental de Avilés, reclama «extremar la prudencia» al tratar de analizar un caso semejante cuando «los datos, la información es muy escasa. Son casos muy complejos y nos faltan herramientas para poder realizar un examen». Añade que «una separación, un divorcio, es un hecho muy estresante, es como un duelo, con las mismas fases, y hay personas que no saben cómo superar esa situación».

Martínez Jambrina asegura que casos como el que se acaba de producir en Avilés «son muy escasos. Y si analizar cualquier suicidio es tremendamente difícil, en este caso aún lo es más». Porque, añade «establecer la relación de causalidad en un acto como el suicido me parece de lo más atrevido».

La primera aproximación desde el desconocimiento en este tipo de situaciones, en los que el intento de suicidio va acompañado de arrastrar a la persona a la que más se quiere, se suele relacionar con la locura. Pero el doctor Martínez Jambrina lo descarta. «En esos casos es más frecuente la maldad, la psicopatía, la personalidad alterada que la locura», señala. 

En su opinión, «no se puede ni se debe realizar diagnóstico de aquello que se desconoce, y más cuando se trata de un suicidio, que es un acto muy particular y es muy difícil meterse en la cabeza de esa persona». Por eso, reclama «prudencia» y no realizar análisis precipitados.

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