Una familia del Nodo convive desde hace un año con una plaga de cucarachas: "Estamos desesperados"

Insalubridad y abandono. Así describe Nair Llames, vecina de El Nodo en Avilés, el estado del edificio en el que reside, todo a causa de la plaga de cucarachas que padece desde hace un año y de la que asegura haberse desentendido la cofradía de pescadores, propietaria del poblado marinero.

El piso que se encuentra justo debajo del de Llames es el foco del que proceden los insectos, un inmueble antiguo en el que no reside nadie desde hace ocho años y cuyos desperfectos fruto del paso del tiempo no han sido subsanados, originando humedades y daños en el techo que coincide con el suelo de la vivienda de la afectada y por donde la plaga aprovecha para subir a su piso.

"El piso de abajo no lo limpian, ni se preocupan por él, está cerrado y abandonado", explica Llames.

Hace un año, la afectada ya denunció una avería en el baño que había provocado que no tuviesen agua en el inmueble. Un desperfecto por el que tuvieron que sujetar la vivienda con puntales de obra, espacio que aprovechan los insectos para entrar en su casa.

"Tengo una plaga increíble y llevo tres semanas pidiendo que vengan a hacer algo, a fumigar y a hacerse cargo del problema. La comunidad no puede solucionarlo y Tomás Badiola, (el patrón mayor de la cofradía de pescadores de Avilés) solo nos da largas", dice la vecina del Nodo, que lleva un año sufriendo esta situación.

Ante el caso omiso que denuncia Llames por parte de la cofradía de pescadores, anuncia que el siguiente paso será poner el caso en manos de Sanidad.

"Queremos que la cofradía nos facilite otro piso porque no aguantamos más. La estructura del piso de abajo se está cayendo y cualquier día se derrumba todo, encima ahora las cucarachas... estamos desesperados y pasan de nosotros", denuncia Llames.

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