El Ayuntamiento exige a Urbaser que la subida de su contrato revierta en los sueldos de la plantilla

La empresa Urbaser, a la que el Ayuntamiento de Avilés adjudicó en concurso público en 2021 el contrato de la limpieza, el baldeo y la recogida de basuras en el concejo, ofreció en la última reunión que mantuvo con los miembros del comité de huelga "una subida salarial de 500 euros para 2023, pero sólo 200 consolidables en las pagas de julio y diciembre; y para los años 2024 y 2025, 500 euros cada año", según explicó ayer Javier Alvaré, el presidente del órgano de representación de los alrededor de 170 trabajadores de la compañía en Avilés. Lo hizo ayer, al frente de la manifestación que recorrió las calles de Avilés tras una pancarta que rezaba: "Urbaser nos quiere empobrecer".

Los trabajadores de la empresa de la limpieza urbana salieron de la Casa Sindical para llegar al Ayuntamiento. Allí, Pelayo García, el concejal de Servicios Urbanos, anunció a los representantes de los trabajadores que el Consistorio va a exigir a la empresa "seriedad y transparencia con sus trabajadores". Y añadió: "El Ayuntamiento va a utilizar todos los mecanismos a su alcance para que la cláusula de subida del contrato repercuta en las mejoras salariales de los trabajadores". Esa cláusula de revisión del contrato de la que habla supone un incremento del 3,18 por ciento en los ingresos de Urbaser. "En caso de no producirse esta repercusión a los trabajadores, articularíamos los mecanismos previstos en la ley para evitar este enriquecimiento, podemos decir, ilícito de la empresa", señaló el concejal socialista.

"Queremos que se cierre la negociación a la mayor brevedad posible y, dado que los trabajadores manifiestan que existen una serie de mejoras en la operatividad del servicio que deben de producirse, hemos propuesto establecer una serie de reuniones periódicas del encargado del contrato con un representante del comité de empresa para que podamos saber de primera mano en el Ayuntamiento cuáles son las incidencias en el servicio", destacó García.

En todo caso, señalaron los trabajadores, "aunque aplicaran este 3,18 por ciento, estamos hablando de una miseria". Alvaré explicó, en este sentido, que "el sueldo más bajo –cuarenta horas a jornada completa–, por las mañanas estará llegando a 980 euros aproximadamente". El trabajador nocturno, el que se encarga de la recogida de basura y del baldeo de las calles, por su lado cobra algo más: "Un conductor está por mil doscientos y pico euros, con plus de nocturnidad".

Esta es la situación que los trabajadores quieren revertir. Por eso ayer salieron a la calle al grito de "Manos arriba, esto es un atraco" y por eso solicitaron los permisos pertinentes para iniciar una huelga general indefinida a partir del próximo día 25. Sin embargo, por un error burocrático en el proceso de notificación a la empresa de la convocatoria de paros, esta va a empezar a las 00.00 horas del Viernes Santo, el fin de semana de las fiestas del Bollo.

"Tuvimos una reunión con la empresa después de la movilización y del encuentro con Pelayo García y pensábamos que era para modificar la oferta salarial, pero no. Vinieron como a amenazarnos", señalaron desde el comité de empresa. Este periódico se ha puesto en contacto con Urbaser para conocer su punto de vista sobre la crisis abierta en Avilés, pero la compañía declinó hacer declaraciones.

Los trabajadores de Urbaser en Avilés y los representantes de la empresa tienen hoy una cita en el Servicio Asturiano de Solución Extrajudicial de Conflictos (Sasec).

El contrato de limpieza y recogida de basuras de Urbaser fue aprobado por el Pleno en el verano de 2021 con una valoración económica superior a 59 millones de euros.

Suscríbete para seguir leyendo