La familia de las Doroteas sopla sus primeras 65 velas

El centro, donde se imponen las relaciones de "cercanía y confianza", cuenta con docentes tan experimentados como Beatriz Ayuso: "Empecé con 4 años, tengo 62 y sigo aquí"

I. G.

El Colegio Paula Frassinetti, para todos Las Doroteas de Avilés, cumple este curso 65 años desde que las primeras nueve hermanas de la congregación de las Doroteas se instalan en Avilés. Cinco años más tarde, en 1963, se dio la primera clase en la localización actual, donde han estudiado miles de avilesinos desde entonces. "Han pasado 65 años de verdadera vocación por la educación y a pesar de todos los cambios que se han producido a nivel social, familiar, educativo…. el colegio sigue siendo fiel a los mismos principios y valores que inspiraron sus orígenes: educar por la vía del corazón y el amor", señala Juan Muñiz, director del centro, quien no duda en resumir la vida en el centro como "una familia". "Los alumnos mayores cuidan y quieren a los más pequeños, la relación con el profesorado es de cercanía y confianza, los antiguos alumnos vuelven siempre a contarnos como les va", añade Muñiz, quien se deshace en elogios de un centro concertado que es de los pocos avilesinos que ha crecido en el número de alumnos según las previsiones para el próximo curso, teniendo en cuenta que este año "la familia" está formada por 780 personas y a partir de septiembre subirá la matrícula hasta 797.

No pocas docentes del centro ya fueron alumnas en su época y luego está el caso de Beatriz Ayuso, que lleva 42 años de maestra de las Doroteas, de Infantil y en los últimos años de Primaria. Se jubila en dos años. "Llevo aquí desde los cuatro años y tengo 62", resume Ayuso, que salvo el tiempo que pasó por la Universidad Padre Ossó, el resto lo ha pasado en las Doroteas, entre uno y el otro lado del pupitre. "Acabé la carrera en junio y el 4 de octubre de ese año me incorporé al centro y aquí estoy", afirma con una sonrisa antes de relatar su experiencia profesional que comenzó como maestra de Primaria durante 4 años, otros 24 en el ciclo de Infantil y el resto, de nuevo en Primaria. Actualmente es la encargada de la biblioteca y, además, imparte varias materias como Cultura Asturiana y Religión, entre otras, de Primero a Cuarto de Primaria.

"Siempre he estado de maravilla, de alumna y de profe muy bien y con el paso del tiempo, observo que los niños siguen siendo maravillosos y que quizá ahora hay más intromisión de las familias en el centro y que hay más burocracia, pero nada más, estoy encantada en este colegio, es mi casa", señala la docente, que ha da dado clase a padres y sus hijos y comparte conversaciones con abuelos, como ella, que también llevan a sus nietos al centro. Los suyos viven en el extranjero.

"La dirección y el claustro y el personal del centro, no solo está preocupado por ofrecer a nuestros alumnos una excelente preparación académica sino y, sobre todo, experiencias de vida que les ayuden en su crecimiento personal", destaca Muñiz, que destaca que el alumnado de Las Doroteas "tiene la posibilidad" de participar en voluntarios nacionales e internacionales.

También destaca los campamentos y actividades estivales, viajes culturales y convivencias, competiciones deportivas y talleres. "Entre todos vamos tejiendo la historia del colegio buscando ser siempre una sola familia y un solo corazón. Nuestro deseo es seguir presentes, al menos otros 65 años más", concluyó Juan Muñiz.

Suscríbete para seguir leyendo