La iglesia parroquial de Santa María de Noreña recupera todo su esplendor. Tres meses después de que un camión derribase la esquina del pórtico lateral del templo, edificado en el último tercio del siglo XVI, la estructura ha sido rehabilitada. La obra ha sido ejecutada por operarios de una empresa especializada enviada por la aseguradora de la parroquia. Los trabajos duraron apenas un par de días, y en la jornada de ayer ya habían concluido.
En el seno de la comunidad religiosa, la actuación de los operarios ha sido valorada de manera muy positiva, toda vez que se aprecia la calidad del trabajo y la eficiente reposición de la estructura. La pieza maestra de la actuación es la nueva esquina de la cornisa, un delicado trabajo de cantería que encaja a la perfección con el resto de la estructura, y que tuvo que ser colocada con una grúa ante el peso de la piedra.
Además, la actuación incluyó la reposición del tramo del tejado del pórtico que había sido igualmente destrozado por el camión.
El daño al pórtico se produjo a finales del mes de octubre pasado, cuando la caja de un camión que circulaba por la calle de la Iglesia en dirección al centro de la Villa Condal impactó contra la esquina del pórtico lateral, provocando importantes daños.
Aunque el conductor se dio a la fuga tras el impacto, unas grabaciones de las cámaras de seguridad del polígono de La Barreda y los datos aportados por dos testigos permitieron dar con él semanas después. Entre la comunidad religiosa hay cierto temor a que el siniestro se repita, habida cuenta de la proximidad de la carretera al pórtico.
