El Ayuntamiento de Siero y el nuevo mando en funciones del cuerpo de Policía Local han decidido nombrar tres nuevos subinspectores en su estrategia para optimizar la organización del cuerpo. Se ha convocado una comisión de servicio para seleccionar a estos nuevos responsables, aunque las personas llamadas a ejercerlas ya están señaladas. El cuerpo se divide en cinco grupos y cada uno cuenta con su subinspector. En los próximos días, con los nuevos nombramientos, tres de ellos pasaran a contar con dos mandos.
En ese contexto, nada asegura que los que ya llevan varios años como subinsopectores -en la primera línea del sindicato SIPLA, en guerra con el gobierno- vayan a ser los encargados de liderar el grupo. La orden vendrá del Ayuntamiento y del propio jefe en funciones de la Policía, Fidel Fernández, antes delegado sindical del CSIF, enfrentado al SIPLA.
Esta decisión se venía rumiando hace tiempo y se concretará antes del fin de semana, cuando, por bajas, no se contaba con mandos suficientes para dirigir los grupos.
Las plazas están abiertas a concurso de todos los agentes, pero se valorará especialmente haber superado los exámenes de oposición al puesto. Por eso, hay tres agentes -que, aun aprobando, no cuentan con la plaza- que son los señalados para obtenerlo.
En este sentido, los nombramientos no premian especialmente a los afines a uno u otro sindicato. Uno de ellos será un afiliado al SIPLA, otro, al CSIF, y el tercero, un independiente, sobre el que hay consenso entre todas las partes.
Sus nuevas atribuciones se harán oficiales en los próximos días. Con ello se busca, en principio, mejorar la organización del cuerpo, fuertemente criticada en los últimos meses por el Alcalde, afirmando que había absentismo injustificado, y horas extra y vacaciones de más.
Esta noticia salta cuando las negociaciones entre el SIPLA y el gobierno municipal parecen haber vuelto a encallar después de que el sindicato se levantara de la última mesa de negociación que mantuvo con el gobierno municipal, en la que no estuvo el Alcalde, quien había optado por delegar en el concejal de Seguridad Ciudadana para tratar de suavizar la crispación que existe con esta facción mayoritaria de los agentes de Siero.
El enfrentamiento se inició en octubre, aunque se remonta más de una década, cuando hubo una división en el cuerpo por tensiones internas. El gobierno entró en juego en octubre de este año, cuando el sindicato comenzó a manifestarse ante al Ayuntamiento.
Entonces, el Alcalde sacó a la luz las supuestas irregularidades en la gestión del cuerpo, que le costaron el puesto al comisario jefe, José Enrique Fernández. Esto recrudeció más la guerra, que aún empeoró cuando la otra facción ascendió al poder dentro del cuerpo, con el nombramiento como jefe en funciones de Fidel Fernández.
Con las negociaciones para la paz en un momento crítico y a pocos días de que se cierre el concurso para optar al puesto de Comisario Jefe, llegan estos nuevos nombramientos. Queda por ver cómo encaja un segundo subinspector en tres de los grupos del cuerpo y si, en efecto, sirve para mejorar el funcionamiento de la Policía o si, por contra, desata una nueva lucha por el poder entre facciones. Esto se sabrá antes de finales de esta semana, cuando se haga oficial.
