La imagen de la Virgen del Carbayu ya no está en el Ayuntamiento de Langreo. Sobre las tres de la tarde de ayer, un operario municipal se encaramaba a una escalera para acceder a la hornacina y retirar, con la ayuda de otro trabajador, la efigie mariana, que ha estado en el Casa Consistorial desde hace casi 60 años. Posteriormente, la imagen era trasladada a la capilla de la residencia de personas Virgen del Carbayu, donde permanecerá en depósito hasta que se tramite la cesión. Se cerraba así la tensa semana vivida en el seno del Ayuntamiento. El momento de mayor crispación se produjo el martes, cuando concejales del gobierno local (IU-Somos) fueron increpados por decenas de vecinos en el acto de entrega de las firmas contra la retirada de la imagen.

El alboroto del martes contrastó con el silencio vivido ayer en el Consistorio, donde las escasas personas presentes apenas pronunciaron palabra mientras se sacaba a la Virgen de la hornacina. "Habíamos contratado una empresa para tener una caja especial para el traslado, de forma que la retirada de la imagen se realizara con todas las garantías", indicó ayer el alcalde de Langreo, Jesús Sánchez, para añadir a continuación: "Queríamos dar cumplimiento a la moción con todo el respeto".

Tras abandonar el emplazamiento en el que ha permanecido desde 1958, la imagen de la patrona de Langreo fue trasladada hasta la residencia de mayores Virgen del Carbayu, en Ciaño, un equipamiento gestionado por Mensajeros de la Paz. "Quiero agradecer la disposición que han mostrado la directora de la residencia y el párroco de Ciaño", aseguró el regidor, que no quiso concretar si la propuesta surgió de la residencia o del propio gobierno local.

La efigie mariana permanecerá en depósito mientras se tramita su cesión. "Primero queremos comprobar cuál es la situación de la imagen porque no se puede ceder un bien que esté en mal estado. La talla parece estar bien, pero va a examinarse con detalle y ya hemos comunicado a los responsables del la residencia que, si fuera necesario, el Ayuntamiento colaborará en su restauración", expresó Sánchez. Y añadió: "Se ha hecho todo desde el máximo respeto. No me mueve ningún tipo de animadversión ni sentimiento anticlerical; como he dicho otras veces se trataba de preservar la igualdad de los langreanos, en esta caso en los referente al culto religioso, y cumplir un acuerdo plenario".

La retirada de imagen provocó las críticas ayer del presidente de la Sociedad de Festejos "Virgen de El Carbayu", Julio González. "Se dijo que la talla se iba a quitar de forma consensuada y se ha hecho por sorpresa, sin avisar a nadie. La residencia de mayores de Ciaño me parece un buen sitio para que esté la imagen, pero desconozco si ha sido una decisión tomada en solitario por el gobierno local o se ha acordado con el resto de grupos".

José Ángel Pravos, párroco de Sama y arcipreste de la comarca del Nalón, también valoró de forma positiva que la talla "esté en lugar de culto en vez de en una despacho o un almacén municipal", aunque manifestó no saber "cuál fue la motivación del Ayuntamiento para elegir el nuevo emplazamiento. Es moverse en el terreno de las hipótesis, pero quizá haya una próxima Corporación que no comparta el criterio de la actual y decida que la imagen vuelva al Ayuntamiento".

Moción

La retirada de la imagen de la Virgen del Carbayu viene motivada por la moción aprobada en marzo por el Pleno para unirse a la red nacional de municipios por un estado laico. Uno de los puntos del escrito indicaba que en los edificios dependientes del Consistorio "no existirá simbología religiosa, salvo aquella que signifique un bien patrimonial e histórico especialmente contrastado". La moción, presentada por IU y Somos, fue apoyada por el PSOE y Ciudadanos, y rechazada por el PP. La parroquia de Ciaño impulsó una campaña de recogida de firmas y recabó 5.482 apoyos que fueron entregados el martes en el Ayuntamiento. El acto congregó a 300 personas y concluyó con insultos y airados reproches hacia los ediles del gobierno local por una parte de los presentes, al entender que los concejales de IU y Somos se habían mofado de ellos con sus sonrisas. El Alcalde criticó ayer la actitud adoptada por parte de los partidos de la oposición. "Ya no voy a hablar de que PSOE y Ciudadanos aprobaran una moción y ahora traten de quedar bien. Lo que lamento profundamente es que ni ellos ni el PP hayan condenado públicamente lo que pasó el martes en los soportales del Ayuntamiento", afirmó Sánchez.

Por su parte, el Comité local del Partido Comunista de Langreo, aseguró que "quiere agradecer y apoyar sin ningún tipo de fisuras al equipo de gobierno de IU y Somos y les anima a ser perseverantes en el intento de no dar marcha atrás en la necesaria separación iglesia-instituciones, no cayendo en chantajes ciudadanos". Para el PCE "por primera vez en decenios democráticos, una Corporación cumple su cometido a favor del laicismo constitucional; hay que evitar la sangrante imagen de priorizar en un estado aconfesional cualquier religión sobre otra".