El Ayuntamiento de Langreo pretende implantar una red de huertos escolares en los centros del concejo para acercar a los alumnos el conocimiento de la naturaleza y las técnicas de cultivo. En la actualidad hay algunos colegios e institutos del concejo que ya desarrollan iniciativas similares, pero la intención del Consistorio es poner en marcha un plan más amplio para atender la creciente demanda de los equipamientos docentes por la materia. Hasta ahora una decena de centros del municipio ya han manifestado al gobierno local su interés por contar con uno de estos huertos. Se trata de ochos colegios, un instituto (el IES Santa Bárbara) y el centro de apoyo a la integración de Pando.
"Ahora mismo estamos barajando presupuestos para ver la mejor fórmula que nos permita poner la actuación en marcha. Lo que queremos es que los chavales se familiaricen con todo los que tiene que ver con el campo y le medio natural de una forma lúdica", aseguró Rosario Hernández, edil de Juventud y Medio Rural de Langreo, para citar a continuación algunas de las iniciativas programadas por el Ayuntamiento con el mismo propósito. "Se han programado travesías para conectar a los jóvenes con la naturaleza dentro del programa Lobo Nómada y vamos a poner en marcha una excursión a Bimenes para los chavales".
En la actualidad hay varios centros de la comarca que tiene en marcha iniciativas vinculadas a los huertos escolares. Uno de ellos es el colegio La Llamiella de Riaño, que impulsa el programa educativo "Huertos escolares-comunales", una iniciativa que trata de estimular las capacidades de los alumnos al tiempo que fomenta el conocimiento del medio natural.
Creatividad
Los escolares plantan tomates, calabacín, patata o lechugas. En las clases se habla a los escolares de los tipos y técnicas de cultivo y de algunos de los sistemas de riego que hay como el goteo, por inundación o por aspersión. El proyecto involucra a escolares, docentes e incluso familiares de los estudiantes, que también ponen su grano de arena.
El objetivo es fomentar la creatividad y el talento de estudiantes a través de un aprendizaje activo. El 60 por ciento de la producción revierte en la comunidad educativa y el 40 por ciento restante se vende a través de una cooperativa. Esos recursos se reinvierten en la propia cooperativa y sirven para que los alumnos de los próximos cursos sigan contando con buenos materiales.
El IES Cuenca del Nalón es otro de los centros en los que se utilizan este tipo de estrategias docentes. Estudiantes de primer y segundo curso de la ESO utilizan un huerto como instrumento de aprendizaje. Los alumnos van rotando por el huerto en grupos pequeños. Al menos hacen una salida semanal. El objetivo es no limitar la enseñanza al aula y aprender de forma práctica, según las claves que manejan los propios docentes.
