"Estaremos vigilantes, no vamos a tolerar un repunte fascista en nuestros territorios". Así de contundentes se mostraron los responsables de las agrupaciones socialistas atacadas en la madrugada del viernes, y que amanecieron llenas de pasquines contra la decisión del Gobierno de Pedro Sánchez de exhumar los restos del dictador Francisco Franco del Valle de los Caídos. Por lo pronto, todas las agrupaciones tienen previsto denunciar estas acciones -Langreo y San Martín ya lo han hecho-, y condenan una situación que califican de "sin sentido".
Y es que en la mañana del viernes, las casas del pueblo y las sedes de las agrupaciones socialistas en Mieres, Langreo, Pola de Lena y San Martín del Rey Aurelio aparecieron llenas de pasquines en defensa de Franco. Con el lema "El Valle no se toca", en referencia a la exhumación de los restos del dictador que pretende el Gobierno, los carteles mostraban imágenes de la vida de Franco y la cara de Pedro Sánchez bajo el lema "El PSOE profana tumbas". Un ataque similar al que ya sufrió Podemos en su sede de Gijón.
El secretario general del PSOE en Langreo, Toni Ríos, señaló ayer que tanto su agrupación como la de San Martín ya han presentado conjuntamente la correspondiente denuncia en la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía del concejo langreano. El responsable socialista indicó que "parece ser que hay un leve repunte del movimiento fascistas, y no es nada halagüeño". Sin embargo, entiende Ríos que "esto quiere decir también que estamos haciendo bien las cosas, que vamos por el buen camino, si el fascismo es el que se molesta, es que estamos haciendo nuestro trabajo". La exhumación de los restos de Franco puesta en marcha por el Gobierno de Sánchez es para el político local "una deuda con la historia y con muchas personas, tenemos que resolverlo de una vez por todas, y todo lo que vaya en contra de nuestro planteamiento a este nivel entiendo que quiere decir que vamos por el camino correcto". "Nosotros vamos a estar atentos a todo lo que suceda, para denunciar estos hechos, y que hay que distinguir entre la libertad de expresión y el incidir en elementos que pasan una barrera como atentar contra inmuebles o personas", señaló Ríos, que cuestionado por posibles autores, manifestó que "no tenemos ni idea, más allá de que vendrá de esa nebulosa neofascista que existe".
La secretaria general del PSOE de Mieres, Ana González Cachero, a la que el ataque pilló de vacaciones, anunció que la intención de su agrupación era denunciar también el ataque contra la Casa del Pueblo mierense. Además, mostró su indignación ante los hechos: "Vivimos en un Estado de derecho, y la ley está para cumplirla, y las personas que nos atacaron se niegan a que se cumpla una ley. Lo que no puede ser es que cuando nos interesa apelemos a las leyes y cuando no nos las saltemos", indicó González Cachero.
José Ramón Martín Ardines, secretario general del PSOE de San Martín del Rey Aurelio, cuya sede también fue atacada el viernes, afirma que no ve un incremento preocupante del fascismo. "Pienso que hay una minoría que esperamos que no aumente por una polémica absurda", indicó el responsable socialista. Para Ardines, la exhumación de los restos de Franco del Valle de los Caídos "no es una excusa para que haya un crecimiento del movimiento fascistas, es una auténtico sin sentido". "La sociedad española tiene mucho más de que preocuparse que de esta decisión del Gobierno de Pedro Sánchez", zanjó el político asturiano.
Por último, desde el PSOE lenense, su secretario general, Santos Morán, también desveló su intención de interponer una denuncia. "No podemos dejar pasar estos hechos", aseguró. Como Ardines, tampoco se mostró excesivamente preocupado por un repunte del fascismo en las Cuencas, aunque en todo caso, apuntó "estaremos vigilantes ante cualquier movimiento extraño para denunciarlo y para censurarlo".
