La sede de Hunosa en Oviedo acogió ayer la constitución de la mesa de negociación del plan de empresa, presidida por el presidente de la compañía, Gregorio Rabanal. Una primera toma de contacto, tal y como aseguraron los representantes sindicales a la salida, asegurando que se han vuelto a citar para mañana por la tarde para avanzar en la negociación.

"Hemos constatado que hay una predisposición por parte de todos para alcanzar un acuerdo que sea positivo para el grupo Hunosa", destacó el secretario general del SOMA-FITAG-UGT, José Luis Alperi, manifestando su esperanza de que la próxima reunión "sea algo más densa y con mayor contenido". Por su parte, el secretario general de CC OO en Hunosa, Rubén García, señaló que habían trasladado a la dirección de Hunosa su preocupación "por haber esperado tanto en iniciar la negociación del plan de empresa, una vez que ya se había firmado el plan minero". El sindicalista también apuntó que habían demandado la presencia "de un representante de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), accionista universal de Hunosa, en la mesa de negociación".

Y es que en la reunión de ayer sólo participaron miembros de la dirección de Hunosa y otros departamentos de la compañía, frente a los representantes de las centrales sindicales con representación en el comité intercentros. La principal pretensión de las centrales, tal y como había publicad LA NUEVA ESPAÑA, es que la compañía siga extrayendo carbón hasta que consiga generar empleo para compensar el cese de su actividad. Una reivindicación que choca con el borrador de la nueva ley "verde" del Gobierno, que tendría como consecuencia que Hunosa debería desligarse de su tradicional actividad extractiva, y que su futuro debe ser "verde" o no será.

Solo queda menos de mes y medio para que, siguiendo la decisión de la UE, las minas que no sean competitivas tengan que dejar de seguir extrayendo carbón, mientras que las que quieran seguir adelante tendrán que devolver las ayudas cobradas. El caso de Hunosa, al tratarse de una empresa pública, es singular, y la negociación por su futuro se realiza aparte.