Un conductor natural de León se llevó por delante el pasado sábado una farola del aparcamiento de tierra existente en el barrio de Oñón. Los testigos se percataron de inmediato del avanzado estado de embriaguez en que se encontraba el causante del accidente, impresión que confirmó la prueba de alcoholemia que le realizó la Policía Local de Mieres. El resultado fue de 0,78 miligramos de alcohol por litro de sangre (el límite está establecido en 0.25 miligramos). La imprudencia de este conductor fue mayúscula, ya que viajaba en el vehículo con su hija, menor de edad, que por no sufrió daños.

La Policía Local procedió a la detención de J. U. A. G., de 55 años de edad y vecino de León, tras triplicar este la tasa de alcohol permitida. Está acusado de un delito contra la seguridad vial debido al accidentes de circulación que causó este domingo sobre las nueve y cuarto de la noche. En concreto, al intentar estacionar su vehículo, impactó contra una de las farolas de la senda peatonal que delimita el parking público. La estructura se vino abajo a causa del golpe. Tras personarse en el lugar una patrulla de Policía Local se le realizó el control de alcoholemia con el resultado ya reseñado. La hija de infractor fue trasladada a la Jefatura de la Policía hasta un familiar residente en Oviedo se hizo cargo de la pequeña.

La Policía Local también denunció este pasado fin de semana a un conductor que dio positivo en el tes de drogas por cocaína. Ha sido sancionado con mil euros y seis puntos del permiso de conducir.