La minería y los fogones, dos mundos aparentemente alejados, se fusionaron durante los últimos días en las instalaciones del pozo Sotón de Hunosa. Ayer tuvo lugar la última jornada del taller de cocina navideña (en la fotografía de la derecha), dirigido a niños de 4 a 12 años y que contó con el respaldo del Centro de Experiencias y Memoria de la Minería. Los pequeños llevaron a cabo la elaboración de sus propios menús navideños y aprendieron a cocinar platos como el tradicional pastel de cabracho, el roscón de Reyes o unos elaborados sacos de merluza en pasta filo. Además, la actividad tuvo un carácter solidario. Durante los días en los que se celebró el taller de cocina se recogieron juguetes que fueron donados a Cáritas (en la imagen de la izquierda), informa Pepe PÉREZ.