La asociación cultural y minera "Santa Bárbara" está totalmente implicada con el proyecto que encabeza el Ayuntamiento de Mieres para el pozo Santa Bárbara, una vez que Hunosa concluya su cesión. Así lo aseguró el concejal de Cultura de Mieres, Juan Ponte, quien señaló que la entidad es quien ha realizado un inventario de los objetos que la Fundación Sanatorio Adaro cederá para exponerse en el interior de la explotación. No sólo eso, también han visitado el pozo junto a miembros de la fundación para analizar cómo podría organizarse la muestra.

De momento estos son los únicos pasos que se están dando al respecto hasta que la hullera estatal no ceda la explotación al Consistorio. Juan Ponte explicó que Hunosa "se comprometió a firmar la cesión cuanto antes, y aunque lleva un poco de retraso, estamos tranquilos porque sabemos que pronto será una realidad. El concejal también recalcó la implicación de la asociación "Santa Bárbara" con el proyecto. De hecho, su grupo de arqueología ha restaurado la bocamina de La Rebaldana, estrechamente ligada al pozo Santa Bárbara. Por eso no era de extrañar que se implicaran también con los nuevos planes del Consistorio mierense. El inventario de los objetos de la Fundación Adaro ya está en manos del Ayuntamiento, lo que facilitará que la exposición pueda ponerse en marcha cuanto antes.

La Fundación Adaro, cederá material médico y máquinas (algunas de ellas de la primera mitad del pasado siglo) que hasta ahora estaban en los antiguos quirófanos del Sanatorio Adaro. Las piezas corresponden a la etapa en la que el centro langreano atendía principalmente a trabajadores mineros accidentados. Entre los elementos hay un aspirador endodigestivo de la casa Wangestein del primer tercio del siglo XX y un respirador de los años setenta de la empresa Bennett. También figuran otros materiales curiosos como una sierra circular para cortar las gasas sanitarias utilizadas en las intervenciones quirúrgicas.

Eso sí, como destacó Ponte, "no vamos a inaugurar las visitas al pozo Santa Bárbara con la exposición del Adaro, antes nos guardamos una sorpresa que no desvelaremos hasta que podamos ponerle fecha". El Ayuntamiento de Mieres lleva varios años intentando conseguir que Hunosa le cediese las instalaciones del pozo Santa Bárbara. La explotación, considerada como Bien de Interés Cultural, fue rehabilitada en el año 2015. En esta intervención se recuperaron los dos castilletes, la sala de compresores y el pozo de ventilación. La recuperación de la sala de compresores, construida hace un siglo, en 1915, y modificada en 1960 supuso la obra más importante.

Los trabajos contaron con un presupuesto de un millón de euros procedentes del Gobierno central, aunque finalmente se ejecutaron por 662.483 euros, siendo dirigidos por el arquitecto José Ramón Fernández Molina. Desde entonces se han organizado visitas guiadas, primero desde el propio Ministerio de Cultura y después por parte de Hunosa, aunque el Consistorio mierense tiene un plan mucho más ambicioso para desarrollar en esta instalación.